Tandil y la Piedra Movediza

Tandil y la Piedra Movediza De los hermosos rincones que nos regala Argentina, Tandil debe ser incluido. Un lugar en donde la naturaleza se nos hace por doquier para disfrutarla y que nos invita al relax pleno. Pero Tandil además tiene otros modos de lllamar la atención y uno de ellos tiene forma de piedra: La Piedra Movediza se ha convertido en un ícono de Tandil, la postal favorita de quienes llegan aquí.

La Movediza, como se la conoce, es una gran mole de granito de más de 300 toneladas con 7 metros de largo y 6 de alto. Pero como si estas dinensiones no fueran suficientes para impactar de lleno en nuestra atención, también cabe destacar que las mismas se encuentran en delicado equilibrio, al borde de un cerro. ¿Cómo es que está así? ¿Cómo es que llegó allí? Las más diversas ocurrencias y mitos se forjaron en torno a la cuestión. Según la ciencia, las sierras de Tandil son formaciones antiguas pertenecientes al Período Precámbrico. Los diferentes agentes erosionadores fueron causando efectos en el manto de granito y provocando que las formaciones fueran cayendo por el cerro. La opinión general de los estudiosos afirma que la Piedra Movediza estaba destinada a rodar aunque por alguna causa, mantuvo el equilibrio durante algún tiempo. Por eso, el desenlace que tuvo no es más que un paso que debió haber ocurrido tiempo antes.

Sin embargo, cabe destacar que la que se puede apreciar ahora es una replica de la original, que decidió alterar su equilibrio para terminar partida en pedazos al borde del cerro un 29 de febrero de 1912. La réplica fue colocada un 17 de mayo de 2007 en este sitio que fue bautizado como el Parque Lítico de La Piedra Movediza de Tandil. Fue realizada con la misma textura y color y en resina.

Fuente Zoom Argentina