Solo un 14% de los españoles reconoce el sello DOP pese a mover 3.590 millones de euros en 2024

La Asociación Española de Denominaciones de Origen, conocida como Origen España, ha puesto en valor la importancia de incluir productos con sellos DOP (Denominación de Origen Protegida) e IGP (Indicación Geográfica Protegida) en los menús navideños. Esta recomendación llega en un momento en el que muchas familias preparan sus compras para las celebraciones de Navidad, Reyes y Año Nuevo. Según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, los alimentos amparados por estas figuras de calidad alcanzaron en 2024 un valor económico estimado de 3.590 millones de euros.

En España, existen 393 Indicaciones Geográficas registradas, de las cuales 225 son agroalimentarias. El país ocupa el tercer lugar en la Unión Europea en número de estos sellos, solo por detrás de Italia y Francia. La producción vinculada a DOP e IGP abarca 900.000 hectáreas y 4,5 millones de cabezas de ganado. Este sector implica directamente a 3.400 industrias y da empleo a unos 200.000 agricultores y ganaderos. Además, otras empresas relacionadas, como fabricantes de piensos, tiendas especializadas, repartidores o auditoras y empresas de etiquetado, también se benefician indirectamente.

El presidente de Origen España, Ángel Pacheco, ha explicado que consumir productos con estos sellos supone apoyar un sector que impulsa el desarrollo socioeconómico en las zonas rurales y ayuda a fijar población en territorios afectados por la despoblación. Pacheco señala que “en estas fechas de tradición y solidaridad, es importante comprar con conciencia, escogiendo para las cenas y comidas navideñas productos de calidad diferenciada, con sello DOP e IGP, que generen un impacto positivo en la sociedad”.

Los productos con DOP e IGP están ligados a un origen geográfico concreto y a unas condiciones medioambientales y culturales específicas. Estos factores les otorgan características propias que se han mantenido durante generaciones. Los sellos garantizan al consumidor que el alimento está vinculado a su territorio y que cumple unos estándares definidos por la Unión Europea.

Sin embargo, el conocimiento sobre estos sellos entre los consumidores españoles sigue siendo bajo. Según el Eurobarómetro realizado en 2024 a más de 26.000 europeos, solo un 32% de los españoles reconoce el logotipo de Indicación Geográfica Protegida y un 14% el de Denominación de Origen Protegida. En la Unión Europea, el reconocimiento ha aumentado en los últimos diez años: del 14% al 24% para las IGP y del 13% al 18% para las DOP. En España, desde 2022 solo se ha incrementado un 2% y un 1%, respectivamente.

Ante este desconocimiento, Origen España anima a los consumidores a buscar estos sellos durante sus compras navideñas. El logotipo DOP es circular y combina los colores rojo y amarillo; certifica que todas las fases del proceso productivo se han realizado en el territorio vinculado al producto. El logotipo IGP es similar pero azul y amarillo; indica que al menos una fase del proceso ha tenido lugar en la zona geográfica correspondiente.

Pacheco recuerda que adquirir alimentos con Denominación de Origen no solo significa comprar un producto concreto sino también apoyar una tradición centenaria basada en el trabajo cuidadoso y el respeto al territorio. Además, subraya la necesidad de seguir impulsando campañas informativas para mejorar el reconocimiento de estos sellos entre los consumidores españoles y poner en valor el esfuerzo diario del sector agrícola y ganadero.

La inclusión de productos DOP e IGP en las mesas navideñas representa una apuesta por un modelo agroalimentario responsable que contribuye al desarrollo rural y garantiza la calidad para quienes buscan ingredientes auténticos durante estas fiestas.