Alejairén Crianza, la prueba de que la airén puede dar grandes blancos

El mundo del vino en España continúa su evolución con propuestas cada vez más innovadoras y respetuosas con las tradiciones y la tierra de la que emergen. Bajo este contexto se circunscribe El Vínculo, una bodega de la familia Fernández Rivera ubicada en el corazón de La Mancha, una región que a pesar de su histórica asociación con vinos tintos, en los últimos años ha sorprendido por la calidad y la innovación en la producción de vinos blancos.

Este año, El Vínculo presenta Alejairén Crianza 2022, un vino blanco que encapsula todo el carácter y la esencia de la airén, la uva blanca más extendida en La Mancha y también una de las más subestimadas hasta hace poco. Proviene de viñedos situados en el paraje La Golosa, conocido por la excepcional calidad de sus uvas. Este vino ha sido cuidadosamente envejecido durante al menos 14 meses en barricas de roble francés, proceso que no solo refina su perfil sino que también resalta la personalidad única de la airén.

El color amarillo pajizo, intenso, limpio y luminoso es solo el preludio de una experiencia olfativa rica en matices. Al acercar la nariz a la copa, se despliegan aromas a frutas cítricas y de hueso, entremezcladas con sutiles toques de caramelo, un legado indudable de su crianza en roble. En boca, Alejairén Crianza 2022 es un vino que no deja indiferente: sabroso, elegante y con una textura untuosa. Su paso por el paladar es una invitación a descubrir un equilibrio perfecto entre frescura y una envolvente sensación balsámica, prolongando su presencia con un posgusto frutal y ligeramente goloso.

Familia Fernández Rivera inauguró El Vínculo en 1999, un proyecto que desde sus inicios se propuso demostrar que La Mancha podía ser cuna de vinos blancos de alta gama. Alejairén, lanzado por primera vez en 2007, no solo fue un reto a las convenciones regionales sino también una reafirmación del potencial de la uva airén. Este vino es el resultado de combinar viñedos de casi 90 años de antigüedad con una vinificación meticulosa, factores que, junto a una climatología favorable, han propiciado que la añada 2022 sea especialmente destacada.

Pensando en la mesa, Alejairén Crianza 2022 es sorprendentemente versátil. Desde los entrantes más selectos, como jamón ibérico o foie, hasta acompañar un ágape completo, este vino promete ser un compañero de viaje que realza cada plato con su carácter complejo y su persistente final. Además, su potencial de guarda sugiere que su evolución en botella podría descubrir aún más capas de complejidad y placer.

La continuidad de la innovación y el respeto por la tradición también se vieron reflejados en Alejairén Tinaja, una edición limitada que surgió como respuesta a un año de adversidades climáticas. Fermentado en tinajas de arcilla y criado sobre sus lías, este vino buscaba un retorno a las raíces de la vinificación manchega, proporcionando una experiencia diferente, donde la pureza de la fruta se expresaba sin intervención de la madera.

A través de su dedicación a la calidad y la innovación, y con una historia que abarca más de cinco décadas y tres generaciones, la familia Fernández Rivera no solo mantiene, sino que también impulsa la rica tradición vitivinícola de España, demostrando que el respeto por el pasado y la apertura hacia nuevas posibilidades pueden coexistir en armoniosa sinergia. Con cada nueva añada, Alejairén no solo celebra la herencia de una familia, sino que invita a todos los amantes del vino a redescubrir La Mancha, una región con un pasado venerable y un futuro brillante en el panorama vitivinícola mundial.