British Airways selecciona el albariño Sin Palabras para servir en sus zonas vip y en primera clase de sus vuelos transoceánicos.
La bodega Castrobrey sirvió desde Vila de Cruces 26.000 botellas a la compañía.
Adegas Castrobrey ha cosechado otro reconocimiento internacional para uno de sus vinos: Su albariño Sin Palabras 07, ha sido seleccionado por la compañía aérea Inglesa British Airways para formar parte de la exclusiva selección de los vinos del mundo que se ofrecen a sus pasajeros de clase de negocios Club World.
¿Qué es el Club World?
Club World es una forma de viajar integral que British Airways ha ideado para la clase de negocios Vip. Este ofrece un amplio mapa de rutas de vuelos trasoceánicos ( Norteamérica, Suramérica, Sudáfrica, Asia y Australia). Es una forma de viajar diferente, donde se ofrecen unos servicios especiales, antes-durante y después del viaje. Accesos a Salas Vip Terraces, Travel SPA, y con espacios privados con todo tipo de servicios durante los vuelos. En todos estos espacios es donde se va a poder degustar el albariño Sin Palabras 07.
¿Cómo ha sido el proceso?
Adegas Castrobrey se ha presentado al tender solicitado por British Airways para incorporar un vino blanco a su cuidada selección de vinos del mundo.
El proceso de selección se dividió en dos partes:
Por un lado una cata visual, donde influía la presentación del vino, el tipo de corcho, etc.
Por otro parte un cata a ciegas, donde se hicieron tres catas espaciadas en el tiempo, y donde el comité especializado encargado del catering de la British Airways escogió nuestro albariño Sin Palabras 07.
¿Porqué es tan especial Albariño Sin Palabras?
La calidad del vino de esta bodega adscrita a la Denominación de Origen Rias Baixas, tiene su origen en varios aspectos:
Por una parte es un "valle térmico", situado en la ribera del río Ulla, los suelos son fundamentalmente derivados de substratos graníticos y con un suave clima atlántico; y se encuentra a unos 100m. por encima del nivel del mar, aunque situado en zona de montaña.
Se trata de la auténtica "viticultura del granito", donde las condiciones para la viña de uva albariño, tanto edafológicas, como climatológicas, son inmejorables.
Por otra parte se realiza un proceso de selección manual durante la vendimia de las cepas de más de 50 años de nuestras fincas.
El resultado es un vino con su propia personalidad, con una acidez muy equilibrada, y con una untuosidad en el paladar que lo hacen diferente al prototipo de un vino Denominación de Origen Rias Baixas.
El albariño Sin Palabras 07, diseño de las marujas-creativas (unas de las más prestigiosas diseñadoras de Galicia), junto con la "máquina de escribir del abuelo", siguen escribiendo la historia antigua, reciente y futura de nuestra bodega.
Esto reivindica la excelente trayectoria de esta bodega familiar y nos ilusiona para seguir trabajando e intentando hacer las cosas lo mejor que sabemos.
Entrevista a Ramón Blanco Lobeto director comercial de las bodegas Castrobrey

Ramón Blanco Lobeto, director comercial de las bodegas Castrobrey.
El director comercial de las bodegas Castrobrey (Camanzo-Vila de Cruces), Ramón Blanco Lobeto, demuestra en sus palabras que sus vinos tienen ese ingrediente que los convierte en algo especial: el cariño con que se miman los detalles más ínfimos para satisfacer los paladares más exigentes. Y lo consiguió, ya que la compañía British Airways seleccionó su albariño Sin Palabras para servir en las zonas VIP y en primera clase de sus vuelos transoceánicos.
¿Cómo surgió el interés de British Airways?
Nuestro distribuidor en Inglaterra nos dijo que British Airways iba a hacer una selección de vinos y solicitaba cuatro botellas. Se genera entonces un proceso de selección con una cata visual en la que se tiene en cuenta la imagen del vino y la relación calidad-precio. Y llegamos a una cata a ciegas en la que los especialistas seleccionaron el Sin Palabras para Club World, que es una zona VIP en los aeropuertos de Heathrow (Londres), JFK (Nueva York) y Oliver Reginald (Johannessburgo) y para la primera clase de sus vuelos transoceánicos.
¿Cómo llegó la bodega a este momento?
Con mucho trabajo y una apuesta constante por la calidad. El abuelo, José Castro Brey, y su esposa, Isabel Becerra, fundaron la bodega en 1982 para hacer un buen vino de mesa hasta que en el año 2000 se entró en la D.O. Rías Baixas. Fue un punto de inflexión que coincidió con la muerte del abuelo. La gerente, Lourdes Castro, su hija, y la abuela se hacen cargo. Ahí entro yo a echar una mano. Nos vemos de pronto con 100.000 botellas sin ninguna distribución. Partimos de cero.
¿Además de la satisfacción, en ventas es un buen pedido?
Es una cantidad importante. Ya se enviaron 26.000 botellas.
Pero el viñedo existía...
El 90% de lo importante lo teníamos porque también había un gran equipo con José y Moncho en la bodega, los Manolos en la viña y Ana y Maite en la oficina.
¿Y el vino?
Desde el principio se opta por un vino de calidad. Es un poco ir a contracorriente por la mala fama del vino de la zona.
¿En qué se distingue?
La principal característica es que tiene una acidez muy equilibrada, algo insólito en los vinos de la zona. Es muy distinto al prototipo del vino de Rías Baixas. No voy a decir que es mejor. Es distinto. Esa diferencia se la da un suelo de base granítica con arcilla, una orientación sur y cepas de 50 a 60 años de las que se hace una selección en vendimia.
¿Y esa filosofía adónde los llevó?
Estuvimos en el Fórum Santiago 2008 siguiendo la idea que tenía el abuelo de la selección de viñas y lo complementamos con un diseño propio de las Marujas Creativas que llevaron a la etiqueta la máquina de escribir con la que el abuelo hizo sus primeras facturas. Y así llegaron premios como la medalla de plata del Iberwine 2008, que nos dieron en Miami.