Miércoles 05 de Noviembre de 2025
Leído › 1075 veces

El martes, 4 de noviembre, un grupo de estudiantes de los cursos de Business Model Innovation y Management dell’Innovazione del Departamento de Economía e Empresa de la Universidad de Catania visitó la bodega Tenute Nicosia, situada en Trecastagni, Sicilia. La actividad se organizó como parte del programa académico para conocer de primera mano cómo las empresas familiares del sector vitivinícola afrontan los cambios del mercado y aplican nuevas estrategias para mantenerse competitivas.
La visita fue guiada por Graziano Nicosia, representante de la familia propietaria y responsable de la gestión de la empresa. Los estudiantes recorrieron las instalaciones, que incluyen una ostería, una despensa, la bodega y una sala de conferencias. Durante el encuentro, pudieron conversar con el equipo directivo y conocer el funcionamiento interno de una empresa que ha sabido combinar tradición y modernización.
Los profesores Rosario Faraci y Cristina Longo, responsables de los cursos universitarios, explicaron que el sector del vino en Italia se considera tradicionalmente maduro y con un bajo nivel de innovación. Sin embargo, la entrada en el mercado internacional de países como Chile, Australia y Estados Unidos ha obligado a las bodegas italianas a buscar nuevas formas de diferenciarse. Esto ha impulsado cambios tanto en las técnicas de producción como en el marketing y los modelos de negocio.
Graziano Nicosia subrayó que el vino producido en la zona del Etna ha tenido un papel importante en la proyección internacional del producto italiano. El reconocimiento DOC (Denominación de Origen Controlada) del vino del Etna podría convertirse pronto en DOCG (Denominación de Origen Controlada y Garantizada), lo que supondría un paso más en su posicionamiento. Según Nicosia, la fuerza principal del vino etneo reside en su vínculo con el territorio y en la capacidad de los productores para innovar y diversificar su oferta. En los últimos años, además de los vinos blancos, rosados y tintos tradicionales, la región ha incrementado su producción de espumosos, situándose como la tercera zona productora en Italia después del Trentino y Franciacorta.
Durante la jornada, los estudiantes tuvieron ocasión de degustar algunos vinos representativos de Tenute Nicosia y conocer las particularidades que aporta el suelo volcánico del Etna a las variedades cultivadas. También se abordaron temas como la importancia del relevo generacional en las empresas familiares sicilianas, el papel del enoturismo para atraer nuevos públicos y las tendencias actuales entre los consumidores jóvenes.
La experiencia permitió a los universitarios observar cómo una empresa familiar puede adaptarse a las exigencias del mercado internacional sin perder su identidad local. La visita concluyó con un intercambio abierto entre estudiantes y responsables de la bodega sobre las oportunidades futuras para el sector vitivinícola siciliano.
Leído › 1075 veces