Carlos Montilla, director del 17ª Festival Ribeira Sacra

Doce escenarios, 22 artistas y dos fechas diferentes, el último fin de semana de julio y el primero de agosto. Es la apuesta del 17ª Festival Ribeira Sacra que este año llega a su segunda edición bajo la máxima de convertirse en un festival para un territorio, ofreciendo no solo un cartel musical atractivo si no apostando por una experiencia en torno al vino y al patrimonio de la Ribeira Sacra.

Y para ello la organización ha trazado dos propuestas complementarias agrupadas en torno a experiencias musicales para sentir el territorio y directos exclusivos en espacios patrimoniales, lo que permitirá disfrutar de un concierto en un barco en el Sil o dentro de un castillo, el de Castro Caldelas. Además, como buen festival gallego, no faltará espacio para la buena gastronomía y otro para originales actividades como catas sensoriales, menús armonizados con los vinos de la zona o un taller de creación de vermuts que promete no dejar a ningún participante indiferente. Hablamos con el director del festival, Carlos Montilla, para que nos adelante contenidos y nos cuente un poco más sobre este festival que cuenta los días para subir de nuevo a la Ribeira Sacra al escenario.

Estamos en plena temporada de festivales en toda España, también en Galicia son bastantes las apuestas que tenemos en los próximos meses, ¿por qué decantarse por el Festival Ribeira Sacra?

Son muchos los motivos para acercarse al festival 17° Ribeira Sacra. El primero, obviamente, su cartel musical, pero a diferencia de otros festivales, en este la música comparte gran parte de su protagonismo con su entorno, en el que bodegas, miradores espectaculares sobre los cañones del Sil o espacios patrimoniales de gran valor ejercen de reclamo perfecto para acompañar a estas propuestas musicales. También la cercanía con los propios artistas, y una variada programación de actividades paralelas son motivos de peso para decantarse por vivir la experiencia de este festival.

¿Cuáles fueron los criterios para organizar este cartel y celebrarlo en dos fechas diferenciadas?

En cuanto a la programación musical, Ribeira Sacra tiene como objetivo poder llegar a un público muy diverso, pensando también en que no somos un festival musical al uso, sino una suma de "ingredientes" que pueden servir como reclamo a públicos diversos (musicales, vinícolas, gastronómicos..) aunque sabemos que el target principal es un público de 25 a 45 años, que busca alejarse de eventos masificados y que busca nuevas experiencias. Para ellos hemos creado propuestas pensadadas tanto para exigentes paladares musicales como Woods o Elvis Perkins, junto a opciones que llegan a públicos generales, como Coque Malla o Morgan. Queremos que diversidad y calidad sean las señas de identidad del cartel.

En esta edición apostamos también por desarrollar el festival en dos fines de semana, "Paisaje y Patrimonio", debido, por un lado, a la gran extensión que tiene la Ribeira Sacra y que por una cuestión de movilidad no podemos concentrar todo el contenido que queremos ofrecer en un único fin de semana, ya que tendríamos que plantear recorridos entre escenarios demasiado largos, y por otro lado queremos resaltar y diferenciar dos de los atractivos más especiales de la Ribeira Sacra, junto con su actividad vinícola, sus increíbles paisajes y un extenso valor patrimonial.

“Una iniciativa como el Festival 17º Ribeira Sacra servirá de apoyo a esta candidatura a Patrimonio de la Humanidad”

¿Se buscaba dar a conocer mejor el espacio que ocupa este territorio? ¿Cree que iniciativas como estas contribuyen en el proceso de declaración de la Ribeira Sacra como patrimonio de la Humanidad?

Una de las frases que mejor nos definen es "Un Festival para un territorio". Esto es ya una declaración clara de que nuestro objetivo en este festival es dar a conocer este amplio territorio al público. Por ello, en cada edición podremos visitar nuevos rincones de la Ribeira Sacra.

Que un territorio como Ribeira Sacra se convierta en Patrimonio de la Humanidad es una misión y un objetivo complejo y ambicioso y que seguro repercutirá muy positivamente en todo el territorio. Para conseguir esta distinción entran en juego numerosos factores, y sabemos que el cultural juega un papel determinante en muchos casos, sobre todo si como en el caso de este festival, se asocia a un modelo de turismo de calidad y sostenible con el entorno. Por estos motivos creemos que efectivamente y sin lugar a dudas, una iniciativa como el Festival 17º Ribeira Sacra servirá de apoyo a esta candidatura a Patrimonio de la Humanidad.

La gastronomía también tendrá su espacio en el festival, ¿qué nos puede adelantar de este ámbito?

Para el área gastronómica contaremos, al igual que en el caso vinícola, con un profesional-comisario que llevará la dirección de este apartado, y que es para nosotros un eje estratégico de actuación. En esta edición será el cocinero del Grupo Nove, Alvaro Villasante, del restaurante Paprika de Lugo, quien se ocupe de elaborar la propuesta gastro del festival, basada en producto de cercanía y de calidad. También contaremos con varios Showcookings que pronto anunciaremos, y con algún otro cocinero local de referencia en algún espacio más reducido.

Poco a poco también se conocen actividades paralelas en las que la música y vino irán de la mano más que nunca, ¿qué nos puede adelantar de estas propuestas?

Nuestros ejes de trabajo son 4: MUSICA- VINO- GASTRONOMÍA Y PATRIMONIO, aunque podemos decir que, en gran medida, la música y el vino ejercen de protagonistas principales.

Por este motivo, nos esforzamos en esta edición en ampliar las actividades paralelas relacionadas con el vino, pero siempre intentando tener un lazo con la música, que nos sirve como hilo conductor de todas las actividades. Las propuestas que ponemos en marcha se llevarán a cabo para grupos reducidos y bajo inscripción previa, y pretenden resaltar la excelencia vinícola de la zona y de forma principal la de las bodegas que nos acompañan en cada edición.

Son propuestas novedosas y pensamos que también muy divertidas, para llevar a cabo en un formato "Festival", en el que buscamos acercarnos al mundo del vino desde una perspectiva menos formal, por decirlo de algún modo.

Tenemos la fortuna además de poder contar con una profesional del sector como I´m The mocker, que ha creado una excelente programación de actividades vinícolas en clara sintonía con la imagen del festival.

¿Cuál es el objetivo que se fijan para establecer el éxito de esta iniciativa?

Para nosotros el primer éxito ha sido poner en marcha un proyecto tan complejo y lleno de particularidades como este y estar hablando de una segunda edición. A partir de aquí los objetivos pasan por asentar esta edición el festival, aspirando a que la gente disfrute de la Ribeira Sacra y mantener el buen sabor de boca que el público se llevó en la pasada edición. Si conseguimos esto estoy seguro que podremos aspirar a nuevos objetivos y retos en los próximos años, pero que nunca vendrán asociados al volumen de público que consigamos congregar, sino a la calidad de las experiencias que consigamos generar para ellos.

¿Han echado de menos el apoyo de administraciones locales o del sector privado para la organización de una iniciativa tan compleja como esta?

La verdad es que sí que nos hubiese gustado contar con algún apoyo más a nivel institucional, principalmente vinculado a la estrategia de Turismo del toda la Ribeira Sacra, ya que creemos que es necesario ir de la mano para poder seguir creciendo. En este momento contamos con un socio estratégico que es la Diputación de Lugo, que nos está apoyando mucho, y está interpretando creo que con gran acierto el potencial para toda la zona de este festival, así como otras instituciones locales. La parte privada sabemos que es cuestión de tiempo para que se sumen, como ya estamos viendo desde la pasada edición a esta. La estrategia y los tiempos en este caso son diferentes.

Desde su experiencia en el desarrollo de este tipo de iniciativas en las que música y vino están implicadas, ¿considera que es una fórmula que corre peligro de desgaste? ¿Qué elementos determinan que este tipo de iniciativas calen y duren en el tiempo?

Todas las propuestas de éxito en eventos, incluida esta, corren riesgo de agotamiento, de fatiga... muchas veces llegada por la repetición de forma sistemática de los mismos modelos y actividades, que si bien en un inicio son exitosos y novedosos, con el tiempo sufren un gran desgaste y acaban por perder público fiel.

Si hacemos un esfuerzo en evolucionar y en desarrollar de forma habitual nuevas ideas, en trabajar de forma directa con el público, haciéndolo una parte más y no solo un mero espectador, podemos tener conexión vinícola-musical para mucho tiempo, ya que son dos ingredientes de éxito asegurado.