
Ambas cifras las proporcionan efectivos de Protección Civil y de la Policía Local, cuyo trabajo elogió el alcalde, José López Orozco, presente en el balance junto a Burgo. «Yo soy perro viejo y puedo decir que los vi motivados», dijo sobre los locales que trabajaron.
Según explicó la concejala, el hecho de que este año el cómputo total haya sido mayor que en 2007 se debe a que «entre semana vino más gente». En cambio, este año, tanto el Día de San Froilán como el Domingo das Mozas no fue posible superar la cifra del año pasado, en la que se alcanzaron las 250.000 visitas.
Esta concurrencia tuvo repercusiones en la hostelería de la capital y de otras localidades limítrofes, como en el balneario de Guitiriz o el Parador de Vilalba, «en los que también hubo 100% de reservas», dijo Burgo.
El alcalde concluyó que «el saldo es muy positivo» y añadió que tanto el equipo de gobierno como la comisión de fiestas ya están «preparados» para las de 2009, «en las que tendremos menos dinero, pero aun así, pueden estar seguros los lucenses de que las fiestas no decairán. ¿Y cómo lo haremos? ¡Imaginación al poder!».
Lage concluyó, al igual que Orozco, que las de San Froilán tienen que ser unas fiestas «de primera», al igual que San Fermín o las Fallas.