Martes 28 de Octubre de 2025
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El Congreso Nacional Fisar 2025 se ha celebrado en la Biblioteca de la Cámara de los Diputados, en Roma, con la participación de figuras reconocidas del sector vitivinícola italiano. El evento, bajo el lema “El vino como instrumento de valorización del made in Italy”, ha reunido a expertos y representantes institucionales para analizar la situación actual y las perspectivas del vino italiano.
Riccardo Cotarella, enólogo y presidente de Assoenologi, ha inaugurado el congreso con un mensaje en el que ha subrayado la importancia de la colaboración y la comunicación para el futuro del vino italiano. Cotarella ha recordado que el sector atraviesa una etapa de reflexión y revisión, pero no de peligro. Según sus palabras, Italia ha superado crisis más graves en el pasado y siempre ha logrado recuperar su posición como referente del sector agroalimentario. Ha señalado que Italia es el mayor productor mundial de vino y cuenta con una gran diversidad de territorios y cultura, pero ha advertido que es necesario seguir comunicando estos valores para no perder terreno frente a otros países.
El congreso se ha desarrollado en un momento marcado por nuevos aranceles estadounidenses y una ralentización temporal de las exportaciones. Datos presentados por Ismea indican que los importadores estadounidenses adelantaron sus compras a principios de año, lo que generó un efecto almacén que alteró los flujos comerciales. A pesar de ello, el mercado europeo representa cerca del 40% de las exportaciones totales, lo que muestra la solidez del sector, aunque también evidencia la necesidad de adaptarse a los cambios.
La Federación Italiana de Sumilleres (Fisar) ha explicado que no se observa una crisis estructural, sino una fase de ajuste que requiere un equilibrio renovado y una comunicación más clara sobre el papel estratégico del vino en la economía y la imagen del país. Roberto Donadini, presidente nacional de Fisar, ha puesto en valor la necesidad de superar divisiones internas y fomentar la colaboración entre asociaciones de sumilleres. Según Donadini, solo trabajando juntos los profesionales del servicio, la formación y la producción se puede impulsar el patrimonio vitivinícola italiano y afrontar los problemas futuros. Ha añadido que esta cooperación entre sala, cocina y territorio convierte al vino en un elemento cultural y motor de desarrollo para Italia. Por este motivo, Fisar apuesta por formar sumilleres competentes y responsables que promuevan una educación sobre el consumo responsable en colaboración con instituciones y asociaciones.
Michele Zanardo, presidente del Comité Nacional Vinos Dop e Igp, ha recordado que Italia cuenta con unas 530 denominaciones de origen e indicaciones geográficas, reflejo de más de 500 variedades autóctonas. Sin embargo, Zanardo ha advertido que diez denominaciones concentran el 50% del vino exportado por Italia. Este dato invita a reflexionar sobre la necesidad de trabajar conjuntamente para dar valor también a las zonas menos conocidas y garantizar tanto la sostenibilidad económica como ambiental. Zanardo ha recordado que Italia fue uno de los primeros países europeos en aprobar una ley sobre denominaciones en 1963, lo que convierte su modelo en referencia para Europa. Sin embargo, considera necesario renovar este modelo porque el vino no es solo un producto económico sino también una expresión cultural.
El chef Davide Pulejo ha intervenido para señalar que las instituciones deberían dar más importancia al factor humano en todos los ámbitos, incluido el mundo del vino. Pulejo considera fundamental educar a los jóvenes para que se apasionen por su trabajo y puedan transmitir esa pasión. Ha afirmado que quienes trabajan en gastronomía y vino son embajadores del made in Italy y que desde ahí debe partir el crecimiento del país.
El encuentro ha contado también con la presencia del vicepresidente de la Cámara de los Diputados, Giorgio Mulè, quien ha apoyado las propuestas para reforzar la imagen internacional del vino italiano. Los participantes han coincidido en la necesidad de unir esfuerzos para comunicar mejor el valor cultural y económico del vino italiano tanto dentro como fuera del país.
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