9 Vinos riojanos que no te puedes perder

Este ranking de vinos cuenta con 9 vinos, 5 de ellos blancos y 4 tintos

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Viernes 14 de Febrero de 2025

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Este Martes he bajado hasta Londres para acudir a la cata The Best of Rioja organizada por el Master of Wine Tim Atkin con el motivo de dar a conocer su report anual sobre la región, que presentó en sociedad al día siguiente. Si bien ya sabéis que no comparto que las guías de vino funcionen bajo sistema de puntuación (ya hablaremos en profundidad de esto otro día en mi blog Atlantic Sommelier, porque me apetece bastante) si es verdad que, este tipo de ocasiones, son una buena oportunidad para ponerse al día con lo que se está cociendo en el mercado, descubrir proyectos nuevos y reafirmarme en el por qué hay cosas que no bebo (porque aunque no hable de ello, catar, cato también cosillas bastante clasicorras hechas de manera más convencional).

El Martes, he de reconocer que pasé una jornada entretenida, cargada de risas y buenos momentos descubriendo proyectos chulos y vinos que me han gustado mucho. Me ha alegrado el poder ver que se empieza a promover con ahínco el hablar de parajes, de pueblos y de viñedos singulares; haciendo que Rioja vuelva a captar algo de interés a quienes nos pone cachondos el apreciar en copa como el terruño cambia la naturaleza de cada uno de los vinos. También me ha gustado ver que hay muchas elaboraciones que huyen de esa tendencia demodé y sinsentido de hacer vinos casposos bajo el patrón de un paladar desactualizado.

Para que os hagáis una idea, este ranking de vinos cuenta con 9 vinos, 5 de ellos blancos y 4 tintos en los cuales brillan más las Garnachas que las Tempranillos. Exacto, no esperéis encontraros por aquí ese perfil de Riojita que todavía se chatea en la mayoría de los bares de barrio, ni esos tintorros a los que parece que dio vida el mismísimo Geppetto. En Rioja también saben hacen vinos que miran al suelo y por aquí os dejo algunas recomendaciones chulas:

El Calado del Espino 2022

El Calado del Espino 2022 elaborado por José Gil es la añada fundacional de su vino blanco. Tiene una parte que viene de un viñedo en Labastida, concretamente en la zona de San Ginés (zona de altitud) y, tiene otra, que procede del Bardallo (que es una zona más cálida en San Vicente). La variedad es la Viura, que fermenta en bocoyes de 500 litros y damajuanas de 54 litros. La dejaron en reposo durante 11 meses sin mover nada la lía para que la textura no domine al vino y se pueda sentir ese fundamento de sus suelos con base limosa y muy calizos. El vino mola mucho. En nariz tiene esa austeridad de los vinos con elegancia, para sorprendernos en boca con unas hechuras y una concentración (fruta muy jugosa de hueso, camomila, polen, pieles de pera) que no te esperas. Muy vívido. Bebible, pero el botellero le va a sentar fetén.

Víctor Ausejo Garnacha Blanca 2023

La Garnacha Blanca del 2023 elaborada por Víctor Ausejo, a pesar de proceder de un viñedo relativamente joven, apunta muchas maneras. Un vino en el que buscan la concentración frutal y se nota. Fermentó en barricas de roble francés (mitad de ellas eran nuevas buscando tostados medios y, la otra mitad, de uno o dos usos) donde permaneció durante 11 mesecicos. Es un perfil de Rioja blanco más clásico, casi aborgoñado, con presencia de esos aromas tostados de la barrica (haba tonka, Werther's Original) muy bien integraditos, sin que se merienden identidad varietal (pimienta blanca, manzana asada, compota de mirabeles y mucha flor blanca). En boca es un vino graso y untuoso pero que a la vez mantiene una vitalidad ácida que le da brillantez y longevidad.

200 Monges Gran Reserva Blanco 2007

Me lo pasé en bomba catando con 200 Monges. Se trajeron varios blancos, algunos ya un poco entrados en años, para 'presumir' de su buen hacer ante el reto de dar vida a vinos que aguanten el paso del tiempo, como este Gran Reserva Blanco del 2007. Esta es la primera añada que se decidieron a hacer cuando por fin quisieron etiquetar un blanco bajo la marca de 200 Monges. Un vino vinificado enteramente en barrica, donde estuvo entre 14 y 16 meses; para luego dejarlo dormitar en botella hasta que se descorchó el martes pasado. Un vino todavía muy vivo, del cual me sorprendió su frescura y nervio en boca. Obviamente amplio, textural y con un ligero punzor que lo hace muy interesante y eterno en boca. Los aromas son seductores ya que se desarrollan bastantes terciarios. La identidad varietal se ha ido confitando y almibarado y le han empezado a salir, muy sutilmente, recuerdos a frutos secos, sirope de arce y toffee. Increíble evolución.

Cerro la Isa Viñedo Singular Blanco 2021

Cerro La Isa es el 'Grand Cru' de Juan Carlos Sancha. Una parcela singular, plantada en el 1906 por su abuelo y bisabuelo, que probablemente sea uno de los viñedos más verticales de Rioja, donde tiene co-plantadas tanto variedades blancas como tintas. En este caso, y aunque el tinto está de escándalo, vengo a hablaros de la cuvée en blanco, en concreto de la añada 2021. Nos encontramos con 5 variedades: Garnacha Blanca, Malvasía, Viura, Turruntés y Calagreño. Todo va co-fermentado en unas barricas especiales de madera francesa (sus duelas salen de la cara norte de los robles, que son más porosas), reposando en las mismas unos 9 meses. Un vino atractivamente afrancesado, austero, muy mineral, anchote y con una columna vertebral súper precisa. Vinazo.

Phinca La Revilla Sexto Año 2015

Esta cuvée de la que os voy a hablar ahora está elaborada por Bodegas Bhilar y, aunque he visto altibajos en la calidad de los vinos que presentaron durante el evento, si que me pareció bastante interesante esta cuvée. Estoy hablando de su Phinca La Revilla, Sexto Año, 2015, una Viura 100% de suelos muy muy arcillosos que fermenta con sus pieles y se tira 6 años en barrica por lo que tiene un color profundamente ambarino. Flirtea con el mundo oxi, es normal, pero también hay aromas atractivos que recuerdan a los orejones, al membrillo, al polen y al caramelo tostado. En boca es piquant, textural (te llena la boca a full power), con bastante grip tánico pero con mucho frescor integrado.

Desniete 2023

Teodoro Ruíz Monge ha sido el descubrimiento de la jornada a nivel personal. Estamos en San Vicente, visitando un proyecto que hace todo con maceración carbónica usando la antigua tina de cemento familiar, clavándose así elaboraciones muy tradicionales. El secreto está en la calidad del fruto, para que sean vinos que miran al suelo y que no estén dominados por la técnica. Como este Desniete del 2023, homenaje a la Antigua Garnacha de San Vicente, proveniente de un viñedo en la zona norte (sobre suelos de roca madre caliza con una pequeña capa superficial de 40cm de arena en algunas partes) que la familia respetó cuando la mayoría de los lugareños las replantaba por Tempranillo. La maceración semicarbónica arranca en hormigón y, a los 5/6 días, se pisa y se pasa a barrica donde termina de fermentar y reposa durante 8 meses. Un vino fresco, super bebible, dicharachero a la par que con mucha identidad. Es una Garnacha etérea y delicada que habla de suelo dejándonos recuerdos a tiza, polvo, piel de naranja, endrina, frambuesa y fresas. Tenéis que probar esto sí o sí.

Nace La Sierra 2023

Nos vamos ahora a la Rioja Oriental para conocer a Carlos, quien está detrás del proyecto Vinos En Voz Baja. Me gustó mucho todo lo que toca, pero me quedo con su Nace La Sierra 2023, un parcelario que sale de la última viña que está justo antes de que nazca la montaña. Es una co-plantación de Garnacha con un poco de Tinto Velasco y Calagreño que se elabora en una bota de mil litros. Es un vino que, a pesar de ser bastante pálido en color, tiene mucha profundidad aromática, destacando las violetas, los anisados, la piel de pomelo, las grosellas y las cerezas. Su boca no sólo es etérea, sedosa y muy dinámica si no que está cargada con la seriedad de un Gran Vino. Muy top.

El Escolladero 2022

En la Rioja Alavesa nos encontramos con Arturo de Artuke, quien está detrás de este El Escolladero del 2022. Un ensamblaje de Tempranillo y Garnacha que sale de un viñedo singular de menos de una hectárea, a 650m de altitud sobre los suelos típicos de la zona (arcilla y cal). Fermentó y pasó de 12 a 14 meses en un foudre pequeño para darnos un vino que habla muchísimo de suelo, dejándonos recuerdos a polvo y grafito. Lo acompañan aromas a laurel, hierbas provenzales secas, lapicero, picotas, ciruelas, moras y algo de pimienta negra. En boca es amplio, tiene coraje y un frescor de la hostia que le da mucha fluidez y perdurabilidad en el tiempo.

Finca El Foro 2020

Termino esta selección volviendo a la Rioja Oriental para hablaros de Finca El Foro 2020 de Arizcuren. Cuvée que sale de un viñedo de 0.7 hectáreas que se sitúa a unos 600m de altitud en las laderas de la Sierra de Yerga. El vino es hijo de la co-plantación de diversas variedades. El mayor porcentaje (un 60%) es de Garnacha, le sigue la Mazuelo (35%) y, el 5% restante, son variedades como la Viura, la Garnacha Gris, y la Miguel de Arco. El afinamiento lo hace en barricas durante unos 18 meses. Un vino que me ha gustado bastante por tener una nariz austera con profundidad de fruta (picotas, frutas del bosque, grosellas), dejes herbales y cítricos (hierbas de monte, pino, monda de naranja sanguínea) y a polvareda de camino seco. Un vino sedoso, piquant, elegante, y con cierto peso a pesar de que el dinamismo, la fluidez, la frescura y la vitalidad son su hilo conductor.

Espero que os haya gustado esta selección y que, al igual que a mi, os sirva para conocer proyectos nuevos y exponeros a vinazos dignos de tener en todo botellero que se aprecie.

Como de costumbre, muchas gracias de todo corazón por leerme y, si no lo estáis ya, os invito a que os suscribáis porque se vienen bastantes cosas muy chulas.

Miguel Crunia

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Un artículo de Miguel Crunia
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