Marqués de Vargas logra la certificación ecológica en Rioja y Ribera del Duero tras reforzar su apuesta sostenible

Bodegas y Viñedos del Marqués de Vargas ha reforzado su compromiso con la sostenibilidad en sus viñedos de Rioja, Ribera del Duero y Rías Baixas. La empresa ha incrementado la inversión en prácticas respetuosas con el medioambiente, siguiendo una estrategia a largo plazo que busca aumentar el valor ecológico y medioambiental de sus explotaciones. El grupo, que integra las marcas Marqués de Vargas, Conde de San Cristóbal y Pazo de San Mauro, basa su plan de sostenibilidad en tres objetivos principales: implantar sistemas de cultivo sostenible que protejan el entorno, impulsar la biodiversidad favoreciendo la actividad biológica del suelo y elaborar vinos que reflejen la tipicidad de cada denominación de origen.

Uno de los ejes principales de esta estrategia es la nutrición del suelo mediante materia orgánica. El equipo técnico explica que su filosofía consiste en tratar el suelo como un ser vivo, donde la viña es un elemento más y todas las aportaciones repercuten directamente en la planta. En los últimos años, el grupo ha implantado cubiertas vegetales en todos sus viñedos. Estas cubiertas, formadas por cereales y leguminosas, cumplen varias funciones: los cereales aportan estructura al suelo, lo protegen frente a la erosión, favorecen la infiltración del agua y ayudan a controlar las malas hierbas. Las leguminosas enriquecen el terreno fijando nitrógeno de forma natural, lo que reduce la necesidad de fertilizantes y estimula la actividad biológica.

La combinación de estas especies crea un ecosistema equilibrado que mejora la calidad del suelo, aumenta la biodiversidad y ayuda a que el viñedo sea más resistente ante los efectos del cambio climático. Además, las cubiertas vegetales evitan la evaporación del agua y reducen la temperatura del suelo gracias al efecto sombra, algo relevante ante episodios de sequía y aumento de temperaturas. El incremento de biodiversidad también activa la vida microbiana y favorece el control biológico de plagas. El grupo trabaja además en conservar la flora y fauna local, consideradas fundamentales para el desarrollo adecuado de la vid.

Graciela Palacios, enóloga y directora técnica de Marqués de Vargas, señala que cuidar la tierra es una garantía para el futuro del vino. Según Palacios, la innovación debe estar al servicio de la naturaleza y es importante comprender la tradición para adaptarla al presente. Afirma que las nuevas técnicas permiten reflejar mejor el carácter del viñedo sin perder identidad.

En 2023, los viñedos de Marqués de Vargas (DOCa Rioja) y Conde de San Cristóbal (DO Ribera del Duero) obtuvieron la certificación ecológica tras varios años aplicando prácticas respetuosas con el entorno. Esta certificación garantiza al consumidor que cada botella procede de un viñedo gestionado con responsabilidad ambiental y preservando su biodiversidad para futuras generaciones.

Ese mismo año, Bodega Marqués de Vargas recibió el certificado ‘Wineries For Climate Protection’ (WfCP) otorgado por la Federación Española del Vino (FEV). Este sello reconoce su compromiso con la protección del clima y avala a la empresa ante clientes, proveedores y consumidores como una compañía que desarrolla su actividad respetando el entorno natural y cumpliendo con los Objetivos de Desarrollo Sostenible marcados por Naciones Unidas.

Con estos reconocimientos, Bodegas y Viñedos del Marqués de Vargas se consolida como un grupo bodeguero que apuesta por elaborar vinos con identidad propia mientras impulsa medidas para cuidar y preservar el entorno donde desarrolla su actividad.