Saca sake

Un juego de palabras para anunciar que la bebida nipona está aquí para quedarse y como no para acompañar otras comidas que no tiene nada que ver con el sushi. Conozcamos algunos maridajes entre cocina occidental y sake

Javier Campo

Lunes 27 de Enero de 2020

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Partamos de la base de que el sake no es un destilado y su graduación alcohólica no es tan alta como la de los mismos. Si en un restaurante asiático te viene un camarero con la cuenta y te dice ¿quiele chupito? No te está ofreciendo sake, lo primero porque es más que probable que sea chino y no japonés y lo siguiente porque el sake no se bebe al final de la comida, sino que se empieza y se termina con él.

El sake es un fermentado como ya os he comentado en alguna que otra ocasión, igual que el vino o la cerveza. Y no. No es un vino de arroz porque el vino solo se hace de uva. Por esa regla de tres, la cerveza sería un vino de cebada ¿no? Su graduación oscila entre los 8 y los 18-20 grados (en realidad es porcentaje en volumen de alcohol).

Otro día os hablaré del proceso de elaboración que es un verdadero arte dentro de la sencillez que comporta hacer esta bebida, pero básicamente el arroz se cuece con el koji (moho) y las levaduras empiezan a trabajar con los azucares, fermenta y tras el prensado, filtrado y pasteurizado ya podríamos decir que tenemos sake, pero todo esto ni es tan sencillo, ni tan básico ni tan fácil de explicar en un solo párrafo. Los honjozo con un pulido del arroz del 70% tienen una pequeña parte de alcohol añadido.

Los tipos de sake son muchos y los subgrupos también, pero lo resumiremos un poco para no liaros mucho. Los junmai podríamos decir que son los sakes premium sin alcohol añadido y con alcohol añadido. Dentro de este grupo podemos encontrar términos como tokubetsu, ginjo o dai-ginjo que ya os iremos explicando. Los futsushu son sakes más económicos en los que el pulido del arroz es menor y no hay mínimo. Los premium se toman fríos y en copa y los más económicos en el vasito típico que se llama o-choko (pero hay más muchos más nombres y tipologías).

Paramos aquí. Esto es muy extenso. Hoy quería contaros que se pueden maridar muchos tipos de comida con sake sin que tengamos que comer niguiris ni norimakis. Solo os voy a poner unos pocos ejemplos y, si os gusta iremos hablando más de esta bebida tan interesante y versátil.

¿Hay algo más español que el jamón ibérico? Algo debe de tener para Japón ya que lo cortan divinamente y no con una katana precisamente. Pues esa parte sabrosa del jamón, lo que los nipones denominan umami encaja a las mil maravillas con un Sohomare Dai-Ginjo.

Si seguimos con un plato tradicional español y de cuchara y os hablo de la fabada asturiana os pondréis las manos a la cabeza si os digo que un Rihaku Nigori por su textura más densa y harinosa encajaría perfectamente.

Pues una ternera gallega a la brasa también se puede acompañar con un sake. En éste caso nos vamos hasta la prefectura de Hyogo donde hacen el maravilloso Tatsuriki Komenosasayaki que aguanta perfectamente carnes potentes y grasas.

Unas frutas con helado de vainilla para acabar el banquete pueden ser acompañadas por un sake de la prefectura de Iwate muy dulce y que se llama All Koji Nambu Bijin. Es como beberte una "chuche".

Si os gusta el tema podemos ampliarlo y seguir con tipologías, procedencias y maridajes de la bebida definida como la "seda líquida".

Javier Campo
Sumiller y escritor de vinos
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