¿Qué opinan los turistas del enoturismo español?

El turismo del vino no consiste únicamente en visitar bodegas; engloba un amplio conjunto de servicios integrados, de forma modular en una oferta muy profesionalizada orientada a la innovación, la originalidad, la diversificación y, sobre todo, no masivos y de gran calidad.

El turismo del vino consiste en la integración de los recursos y servicios turísticos de interés de una zona vitivinícola, planteados desde la autenticidad y la vocación vivencial, con el fin de construir un producto a partir de la calidad e identidad del destino, optimizando la comercialización conjunta, el nivel de satisfacción de la demanda, y el desarrollo socio-económico integral del territorio.

De una encuesta efectuada por el portal www.catadelvino.com a cerca de un millar de enoturistas con el fin de constatar “el estado de salud” de este tipo de actividades relacionadas con el sector del vino se concluye que:

• Un 93 % de los encuestados afirman comprar vino de las bodegas que visitan.
• Un 72 % de los encuestados reconocen no entender la terminología utilizada por el sumiller o enólogo que dirigió la cata de vino ofrecida en la visita a la bodega.
• Un 64 % de los encuestados señalan que lo que más le atrae del enoturismo es visitar la zona y sus alrededores.
• Un 52 % de los encuestados opina que el enoturismo es económicamente rentable para las bodegas visitadas.
• Un 87 % de los encuestados consideran que el enoturismo es rentable para las bodegas a nivel de marca.
• Un 56 % de los encuestados reconocen que lo que más les atrae del enoturismo es degustar el vino en la bodega dónde este se produce.
• Un 67 % de los encuestados afirman que no resulta sencillo localizar en las webs de las bodegas sus actividades de enoturismo.
• Un 52 % de los encuestados señalan que el motivo que les lleva a visitar una bodega en concreto reside en la oferta que las webs de enoturismo publicitan.
• Un 37 % de los encuestados señalan que tras la visita a la bodega lo que más valoran es la explicación de la vinificación y la cata.
• El 83 % de los encuestados señala que recomendarían a sus amigos y familiares el enoturismo como viaje de placer.
• El 91 % de los encuestados reconocen que los buscadores de enoturismo les resultan útil para localizar las actividades de enoturismo.

Por todo ello, podemos afirmar que el enoturismo:

1. Fomenta la cultura del vino.
2. Incrementa la actividad turística en el territorio.
3. Genera marca y una nueva vía de ingresos complementaria a los productores vitivinícolas.
4. Incrementa el consumo y las ventas de vino.
5. Mejora el entorno e infraestructuras.
6. Mejora la imagen del vino como producto y su efectividad comercial en los canales tradicionales.
7. Diversifica y desestacionaliza la actividad turística. El enoturismo se puede realizar todo el año.

En definitiva el enoturismo es una actividad lúdica, cultural y socializadora que cada vez es más demandado en Internet. Las bodegas se están sumando al turismo del vino como una nueva actividad económica complementaria a la de producción y comercialización del vino.