El museo Vivanco inaugura un espacio dedicado a 19 prensas realizadas por Víctor Uzqueda durante 30 años

Esta exposición, fruto de la cordialidad y la admiración entre la familia Vivanco y la familia Uzqueda, y de su mutua pasión por el mundo del vino, se expondrá permanentemente en la Sala 3 del Museo Vivanco de la Cultura del Vino, junto a un interactivo que explica cómo es el funcionamiento de las distintas prensas a lo largo de la historia

Briones

Lunes 16 de Febrero de 2015

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El lema “Devolver al Vino lo que el vino nos ha dado” que acompaña cada proyecto de Vivanco Bodega, Fundación y Experiencias, sigue presente.

En esta ocasión gracias al arte de las prensas en miniatura, un tributo a la memoria, el trabajo y la pasión de Víctor Uzqueda por estos fascinantes ingenios para extraer el jugo de la uva. El viernes 13 de febrero, a las 13.00 horas, Santiago Vivanco, Director General de Fundación Vivanco y Experiencias Vivanco, Taquio Uzqueda, artista, diseñador e hijo de Víctor Uzqueda, y su hermana Conchi Uzqueda, inauguraron en la Sala 3 una exposición permanente, que contiene 19 prensas en miniatura, que también incluyen reproducciones de Bodega.

Un acto en el que Taquio Uzqueda donó estas piezas, tras recoger el testigo generacional de la gran pasión y compromiso de su padre: contribuir al patrimonio cultural del Museo Vivanco de la Cultura del Vino y ayudar a divulgar la cultura del vino entre riojanos y resto del público. “A lo largo de 30 años -señala el pintor Taquio Uzqueda- mi padre elaboró estas maquetas. Y con el mérito añadido de que las hacía en la cocina, ya que no disponía de un taller. Se encargaba de buscar todos los materiales: la chapa, la madera, los tornillos… todo lo necesario para fabricar a escala, tras dibujarlas, estas prensas.

Además, su yerno, relojero, le proporcionaba las poleas y engranajes, por lo que resulta sorprendente que, con los escasos medios que tenía, funcionen a la perfección. Recuerdo que, cuando no tenía soldador, calentaba manualmente el estaño. Esta gran pasión, que inició con 55 años, llenó 30 años de su vida. Hasta que su salud se lo impidió, 3 años antes de fallecer.”

No es la primera vez que esta mutua vocación por el vino y el arte se materializa en una exposición. Entre el 11 de octubre y el 23 de diciembre de 2005, la Sala de Exposiciones Temporales del Museo Vivanco de la Cultura del Vino albergó la muestra Tórculo. Las maquetas de Víctor Uzqueda, una historia del prensado del vino. A partir del 13 de febrero, esta historia de vino, amistad y trabajo, quedarán selladas en esta alacena abierta al mundo.

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