Cómo sentir pasión por el vino

Además de la cerveza, el vino es una de las bebidas más antiguas de las que se tiene constancia; antaño producto exclusivo para nobles y personas acaudaladas y hoy en día accesible para todos los bolsillos y en cualquier lugar, desde una gran superficie a una bodega o las tiendas de vinos online, pudiendo ser usado como excusa para reunirse un grupo de amigos o familiares y disfrutar de un buen caldo o maridándolo con diversas exquisiteces gastronómicas.

Hay varias clases de personas en relación con el vino, aquella persona que lo prueba y a pesar de no entender demasiado se preocupa por buscar algo nuevo, que le aporte sabores y aromas diferentes y aquellas personas a las que no les importa tomar un vino cualquiera. Existe un tercer y un cuarto grupo de personas pero ya nos iríamos a los extremos, aquellas a las que no les gusta en absoluto o aquellos que viven para y por el vino, bien por su trabajo o por su gran afición.

Sirva esta entrada para aquella persona que, a pesar de ser neófita en la materia, se preocupa por ir un poco más allá, porque tiene pasión, porque quiere buscar un vino que le llene y del que pueda decir sinceramente, ”este es mi vino”, con lo que ir adquiriendo una cultura enológica de importancia con el paso del tiempo. Pero esto no es algo sencillo, encontrar ese vino del que se pueda decir que todos sus aspectos son ideales puede llevar tiempo y además no todos los gustos son iguales por lo que la elección de un buen vino es algo muy personal.

Componentes y clases de vino

Partiendo de la base de que los vinos tienen cuatro componentes básicos (sabor, alcohol, taninos y acidez) tendremos que buscar aquel que más se acerque a nuestro gusto y una buena manera es buscándolo en las bodegas online, donde encontraremos una pequeña ficha de cada caldo que nos explicará más sobre las características principales del vino que hayamos elegido o creamos que puede ser un buen producto.

No es lo mismo beber un vino en casa que en un restaurante, hacerlo antes de comer que durante la comida o la cena, beberlo en la barra de un bar que en una terraza disfrutando de unas buenas vistas. Hay que probar el vino en diferentes situaciones, en diferentes copas, temperaturas y maridarlo con comidas variadas.

El vino, independientemente de ser tinto, blanco, rosado o espumoso, como un sol en una galaxia sobre el que giran muchas otras cosas que también deben tenerse en cuenta, porque… ¿de qué vale saber cuál es un buen vino si después no se sabe cómo conservar? ¿Cómo saber qué vino marida mejor con determinada comida? ¿A qué temperatura debe servirse?

La curva de aprendizaje sobre el vino no es muy pronunciada pero se extiende bastante, porque la pasión por el vino no aparece de un día para otro, va mejorándose poco a poco, como si se tratase del proceso de un buen caldo, sólo así se podrá ir adquiriendo esa pasión por el vino...