
El consello regulador de Rías Baixas ha dado por iniciados los trabajos de vendimia en la denominación de origen. Aunque a causa del mal tiempo el inicio de la recogida de la uva ha sido irregular, a mediados de esta semana todas las bodegas estarán inmersas en estas tareas. La previsión de un anticiclón permitirá a los viticultores realizar la vendimia con más tranquilidad de la prevista.
Como ya viene siendo habitual, los viticultores de O Condado y O Rosal llevan ya una semana trabajando en le recogida de la uva. Pero en la subzona de O Salnés, las primeras tareas no comenzaron hasta el pasado viernes. Las bodegas acometieron entonces recogidas puntuales, de la fruta que estaba en un punto de maduración adecuado, para elaborar los pies de cubas. Pero no será hasta esta semana cuando puedan verse las imágenes típicas de la vendimia en las fincas de esta comarca.
La mayoría de las bodegas cuentan con empezar la recogida entre el miércoles y el jueves, si las condiciones meteorológicas así lo permiten. Según los técnicos del consello regulador, la llegada de un anticiclón permitirá que, por lo menos, esta primera fase de la recogida pueda realizarse con tranquilidad. Así, será durante el fin de semana cuando se prevé que la vendimia cobre intensidad.
Teniendo en cuenta todas estas previsiones, el consello regulador tiene ya preparado todo el dispositivo de seguridad para controlar que toda la uva que llegue a las bodegas provenga de la denominación de origen. El equipo técnico lleva varias semanas trabajando en la formación de los 98 veedores que se encargarán de supervisar la entrada de uva en las bodegas, los transportes de uva o mosto entre subzonas y la vendimia en las fincas. Cuentan, además, con el apoyo de las fuerzas de seguridad del estado, que se encargarán de vigilar los transportes por carretera.
Un 10% más que el pasado año.
A pesar del mal tiempo que protagonizó septiembre, las previsiones del consello regulador siguen siendo que la cosecha de este año será un diez por ciento superior a la del año pasado, en lo que a cantidad se refiere. Los técnicos aseguran que no se han registrado pérdidas importantes, por lo que prevén que la denominación recogerá cerca de veinte millones de kilos de uvas, tres más que durante el pasado ejercicio.
Las últimas lluvias apenas afectaron a la producción.
«A colleita está aí e segue aguantando», así respondía ayer Miguel Tubío, técnico de Martín Códax, a las preguntas sobre el estado de la producción de este año. Las lluvias del pasado domingo no han sido precisamente una ayuda para la uva, pero según Tubío tampoco han causado males mayores. «A estas alturas a uva xa non rompe», añadió.
La bodega cambadés planea, al igual que muchas otras de la comarca, comenzar el miércoles con la recogida de la uva. Pero lo hará muy despacio. «Sacaremos algunha que acadou xa a maduración, pero iremos sacando pouco a pouco», afirmó Tubío. Reconoce que la maduración no será como la del pasado año, pero espera que la media de la cosecha se sitúe en los doce grados. Asegura que el grueso de los trabajos se concentrará durante el fin de semana y que, siete días después, las tareas estarán casi concluidas, si el tiempo lo permite.
También los técnicos del consello regulador coinciden en destacar que la calidad de la cosecha es buena. El viñedo se encuentra en buen estado, tanto desde el punto de vista vegetativo como sanitario. La uva está limpia y sana y la evolución de la maduración puede calificarse como correcta, explican en Rías Baixas.