Martilota se consolida como referente gastronómico en Alcalá de Henares

El restaurante Martilota, situado en la Plaza de la Paloma de Alcalá de Henares, se ha consolidado como uno de los referentes gastronómicos de la ciudad. A solo 30 kilómetros de Madrid, este establecimiento ocupa un local de más de 1.200 metros cuadrados distribuidos en dos plantas y con capacidad para 380 personas. Desde su apertura en 2017, Martilota ha conseguido atraer tanto a vecinos como a visitantes gracias a una propuesta culinaria basada en el producto de calidad y una carta que combina tradición y creatividad.

El proyecto es obra de Noel Duque y Jorge Prados, dos empresarios locales que ya contaban con experiencia previa en el sector tras la apertura de su primer restaurante, Noah. Con Martilota, ambos apostaron por un concepto más ambicioso que les permitió consolidarse en la escena gastronómica local y expandirse posteriormente con otros negocios en Madrid, Valencia e Ibiza.

La cocina de Martilota parte del respeto al producto y lo lleva a una carta variada donde se pueden encontrar platos como ensaladilla de pulpo ahumado con aceite de oliva virgen extra de ajo frito y pimentón de la Vera, tortilla trufada estilo Betanzos con espuma de patata o croquetas de queso azul con cecina y mermelada de manzana. Entre las propuestas más elaboradas figuran el nido de sepia laminada sobre falso risotto de sémola de trigo o los ravioli de carrillera de vaca. También hay opciones que fusionan sabores internacionales, como la pasta japonesa con parmesano, jugo de carne y almendra tostada.

La carta está pensada para compartir y disfrutar sin prisas. Incluye desde brioche con gamba roja y papada de cerdo hasta clásicos como buñuelo de bacalao o mejillón tigre. En pescados, se pueden pedir chipirones rellenos de cebolla caramelizada con emulsión de tinta o ventresca de bonito a la brasa servida a la bilbaína. Las carnes tienen un papel importante en platos como steak tartar de solomillo madurado con yema curada al jerez, mollejas glaseadas con parmentier de gorgonzola o solomillo ibérico Wellington relleno de panceta Joselito y acompañado por parmentier de boniato asado. El apartado dedicado a los arroces varía según temporada pero mantiene siempre el objetivo del sabor reconocible y el punto adecuado del grano.

El espacio interior ha sido diseñado por el arquitecto Adolfo Montserrat. El restaurante cuenta con seis ambientes diferenciados, todos modulables para su uso como espacios privados. La decoración utiliza materiales naturales como el mimbre, colores vivos y abundante vegetación para crear un ambiente acogedor. Uno de los espacios más solicitados es el invernadero acristalado, iluminado por luz natural gracias a sus grandes ventanales. Además, Martilota dispone de una terraza panorámica que permite disfrutar al aire libre con vistas sobre la ciudad.

El nombre del restaurante surge a partir del nombre de las hijas de los fundadores: Martina y Carlota. Este detalle refleja el carácter familiar del proyecto y su vocación cercana.

Desde su inauguración, Martilota ha contribuido a dinamizar la vida social y cultural en Alcalá de Henares. Su propuesta gastronómica, la versatilidad del espacio y el trato al cliente han hecho que se convierta en uno de los lugares preferidos tanto para celebraciones especiales como para comidas informales o cenas en pareja dentro del municipio y en toda la Comunidad de Madrid.