El centro de interpretación de Concha y Toro reabre con una experiencia inmersiva en el corazón del valle del Maipo

La bodega chilena fusiona historia, tecnología y naturaleza para transformar el enoturismo y resaltar la tradición vitivinícola local

Viernes 29 de Agosto de 2025

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El centro de interpretación de Concha y Toro reabre con una experiencia inmersiva en el corazón del valle del Maipo

El renovado centro de interpretación de la bodega Concha y Toro, situada en el valle del Maipo, a los pies de la cordillera de los Andes y a solo 20 kilómetros de Santiago, ha abierto sus puertas con una propuesta que busca transformar la manera en que se vive el enoturismo en Chile. Este espacio, que ocupa 12.000 metros cuadrados, ofrece a los visitantes la oportunidad de conocer el origen geológico de los valles vitivinícolas chilenos, aprender sobre los procesos que convierten la uva en vino y sumergirse en una experiencia sensorial basada en la leyenda del Casillero del Diablo.

La vicepresidenta de Vinos Finos e Imagen Corporativa de la viña, Isabel Guilisasti, explica que el objetivo es asumir el papel de custodios de un legado histórico y darlo a conocer, mostrando al mismo tiempo una imagen contemporánea de la marca. El recorrido comienza al atravesar los portones del recinto, donde un camino arbolado conduce al visitante hacia el corazón de la viña. El entorno natural permite dejar atrás el bullicio y la contaminación de Santiago para adentrarse en un paisaje dominado por viñedos y vegetación autóctona.

Uno de los puntos centrales del recorrido es la experiencia sensorial Casillero del Diablo. Mediante proyecciones inmersivas que simulan lava, viento y lluvia, se explica cómo se formó el valle del Maipo y por qué esta zona es considerada la región vitivinícola más antigua y conocida de Chile. Los visitantes pueden escuchar sonidos envolventes y participar en una sala donde se pone a prueba su capacidad para identificar aromas y sabores, acercándose así al trabajo de un sumiller.

La visita también incluye un repaso por los 142 años de historia de Concha y Toro, principal exportadora de vinos en Latinoamérica. Un cortometraje introduce al público en la leyenda del Casillero del Diablo antes de descender a las bodegas subterráneas. Allí, entre barricas y penumbra, proyecciones audiovisuales recrean la historia del diablo como guardián del vino, una tradición que ha acompañado a la marca desde sus orígenes. Esta parte del recorrido no está recomendada para menores de diez años debido a su ambientación.

El paseo continúa por el parque natural que rodea la bodega, con 22 hectáreas pobladas por flora chilena. En este entorno se encuentra la Casa Don Melchor, residencia original del fundador Melchor Concha y Toro, construida en 1883. Algunos visitantes pueden acceder a una oferta gastronómica exclusiva dentro de este edificio histórico.

La jornada finaliza con una visita al Restaurante Bodega 1883 y su Gran Barra Bodega 1883, donde se ofrecen degustaciones que combinan vinos con platos típicos chilenos. El objetivo es que cada persona pueda conocer no solo los productos sino también las tradiciones culinarias asociadas al vino.

Según datos del Catastro Nacional de Enoturismo 2024, Chile cuenta actualmente con 219 viñas abiertas al turismo, lo que supone un aumento superior al 130% en diez años. Cristóbal Benítez Villafranca, director nacional de Sernatur Chile, señala que este crecimiento se debe a la calidad de los valles vitivinícolas chilenos y a la proyección internacional del sector.

Concha y Toro apuesta por unir historia, naturaleza y tecnología para ofrecer una experiencia completa que va más allá de la simple cata. La propuesta invita a conocer el vino desde su origen hasta su llegada a la copa, integrando elementos culturales y naturales propios del país.

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