¿Error en los datos del OIV? Viticultores húngaros discrepan con las cifras de la OIV

El Ministerio de Agricultura de Hungría reconoce el error en la clasificación de datos

Martes 17 de Diciembre de 2024

Compártelo

Leído › 2330 veces

Viñedos en Hungría

A pesar de las recientes cifras publicadas por la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV), que presentaban a Hungría como uno de los países con crecimiento en su producción de vino durante 2024, los productores locales no comparten el optimismo reflejado en los datos. Aunque el informe señalaba una producción de 3 millones de hectolitros, lo que representaría un aumento del 19% en comparación con 2023, la realidad en el terreno ha sido bastante diferente. Según los viticultores húngaros, el año estuvo marcado por una vendimia temprana, rendimientos irregulares y complicadas condiciones de vinificación.

El desfase en las cifras de la OIV se debe a un error en la clasificación reportada por el Ministerio de Agricultura de Hungría. Los datos enviados incluyeron mostos, el jugo de uva sin fermentar que podría no convertirse en vino. Por lo general, la OIV reporta solo la producción vinificada, es decir, vino que ha completado su fermentación. Esto infló las cifras oficiales y no reflejó con precisión la cantidad de vino producido. Según el Consejo Nacional de Comunidades Vitivinícolas de Hungría (HNT), que incluye cifras de bodegas no registradas, la producción real experimentó una caída del 7% en comparación con el año anterior, en lugar del aumento reportado inicialmente.

Péter Gál, jefe del departamento de vinificación y marketing agrario del Ministerio de Agricultura, reconoció las dificultades de los viticultores húngaros y europeos en general. "La vendimia fue excepcionalmente dura este año porque el período de recolección fue más corto que nunca", afirmó. Aun así, Gál destacó que el esfuerzo de los productores ha permitido obtener vinos prometedores.

Las condiciones climáticas fueron uno de los mayores obstáculos de la cosecha 2024. Las olas de calor extremo y las precipitaciones irregulares alteraron el ciclo de crecimiento habitual, provocando una maduración temprana y obligando a los viticultores a acelerar las tareas de recolección. Kurt István Taschner, propietario de una bodega familiar en Sopron, expresó las dificultades con la fermentación de algunas partidas de vino tinto: "Seguimos luchando con uno de los lotes; la acidez volátil es demasiado alta."

En la región de Mátra, Ágnes Dunai explicó cómo la sequía y el calor extremo afectaron a sus viñedos. "Primero fue la sequía y luego las altas temperaturas, lo que hizo que todas las variedades maduraran al mismo tiempo. Tuvimos que recogerlo todo de golpe. Aunque en muchas fincas la producción disminuyó entre un 20% y 30%, nosotros logramos mantener niveles similares a los del año pasado."

Por su parte, Andrea Gere, productora en Villány, describió la cosecha como "rápida e intensa" pero con resultados satisfactorios, destacando la alta calidad de las uvas tintas, como el Cabernet Sauvignon. Una experiencia similar tuvo Ákos Kamocsay, productor en la finca Fehérvári en Somló, quien calificó la vendimia como "muy temprana y muy rápida, pero buena en general".

A pesar de las dificultades, la calidad de las uvas ha sido un factor que mantiene optimistas a los viticultores húngaros. László Romsics, director ejecutivo de la bodega Csányi en Villány, reportó una reducción en los rendimientos del 10–20% pero aseguró que la calidad de las uvas tintas ha sido excepcional. "De esta cosecha saldrán vinos tintos extraordinarios", afirmó. Tamás Borbély, productor en Badacsony, también subrayó que el verano cálido y seco complicó la cosecha, pero el trabajo meticuloso permitió obtener mostos con "excelentes sabores".

En Tokaj, el equipo de Béres Vineyards optó por adelantar la vendimia para preservar la acidez de los vinos blancos, una estrategia que consideraron acertada para garantizar la frescura de los vinos.

El escenario internacional reafirma las dificultades soportadas por los productores húngaros en 2024. Según la OIV, la producción mundial de vino ha caído a su nivel más bajo desde 1961, con Europa siendo la región más afectada. Aunque las cifras preliminares de Hungría parecían sugerir un escenario positivo, la situación real en los viñedos refleja las mismas complicaciones climáticas y operativas vistas en países vecinos.

Los productores húngaros, no obstante, se centran en la calidad por encima de la cantidad y confían en que, a pesar de la complejidad del año, los vinos resultantes estarán a la altura de las expectativas del mercado.

Actualización 18/12/2024

Tras la publicación de nuestro artículo, la OIV confirmó que los datos iniciales divulgados sobre la producción de vino en Hungría para el año 2024 incluían los mostos, un componente que habitualmente no se considera en las estadísticas oficiales de producción vinificada.

En un comunicado remitido a este medio este miércoles, 18 de diciembre, la OIV explicó que tras realizar una revisión interna, detectaron que su serie de datos había sido actualizada de forma incorrecta, lo que infló las cifras publicadas originalmente. Este error fue corregido días después y el informe revisado ya está disponible en su página web oficial. Según la organización, las cifras actualizadas excluyen los mostos y reflejan únicamente la producción vinificada, como es su práctica habitual.

Los datos revisados confirman que la producción de vino en Hungría en 2024 fue inferior a lo estimado inicialmente, en línea con los comentarios realizados por los productores locales y el Ministerio de Agricultura del país. Los datos iniciales de la OIV reflejaban una producción de vino preliminar para Hungría este año 2024 de 3 millones de hectolitros, lo que suponía un incremento del 22% respecto al año anterior. Tras la corrección del error la producción de vino para Hungría se establece en 2,3 mhl, una reducción del -7%

Informe sobre producción mundial de vino actualizado

¿Te gustó el artículo? Compártelo

Leído › 2330 veces