Madrid
Martes 16 de Octubre de 2012
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"Tenemos una voluntad política de seguir manteniendo los programas de alimentos para los más desfavorecidos y hemos alcanzado un acuerdo básico sobre los temas fundamentales de la política agraria común", ha dicho Arias Cañete.
El ministro español se ha reunido con sus homólogos francés e italiano, Stéphane Le Foll y Mario Catania en la sede de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) con motivo del Día Mundial de la Alimentación.
"Consideramos que en un contexto de crisis económica en muchos países de la Unión Europea, de situaciones muy difíciles resulta muy justificado mantener este programa", ha dicho el ministro.
Arias Cañete se ha mostrado muy satisfecho por el resultado de este encuentro en el que los tres ministros han manifestado su intención de hacer "frente común" en las negociaciones de la reforma Política Agraria Común (PAC) para el período 2014-2020 que está llevando a cabo la Unión Europea.
"El hecho de que Francia, Italia y España defendamos que la propuesta presupuestaria que ha hecho la Comisión Europea para financiar la política agraria común es el mínimo admisible, supone un compromiso de defensa de un presupuesto suficiente para la política agraria común", ha señalado.
Para el ministro español la clave es reclamar "flexibilidad" en el sistema de aplicación de la reforma "para adaptarla a las agriculturas de nuestros diferentes países".
Y se ha referido en concreto a un sector con gran peso en los tres países, el vitivinícola, en el que España defiende el mantenimiento de unas cuotas de producción máximas.
"Hemos reclamado que se mantengan los derechos de limitación de plantaciones en el viñedo para evitar crisis de superproducción en la Unión Europea", ha dicho al respecto.
Asimismo, Arias Cañete ha defendido "la participación de los productores agrarios en la cadena agroalimentaria" para obtener "mayor equilibrio" y "mayor fuerza" por parte de estos los "procesos de contratación de oferta y negociación en el seno de una cadena alimentaria que en la Unión Europea tiene fuertes desequilibrios".
Por su parte, Mario Catania ha hecho alusión al sector hortofrutícola y ha señalado que los tres representantes coinciden en que debe haber "un alto cualitativo en la negociación sobre este sector" mientras que Stéphane Le Foll ha apostado por "reafirmar una posición común y colectiva" durante los próximos meses.
En una declaración conjunta, los ministros de Agricultura de Francia, Italia y España, han subrayado la convergencia obligatoria en todos los Estados hacia una sola cantidad (tarifa plana) durante el período que viene no es relevante.
En este sentido han asegurado que los Estados Miembros deben disponer de cierta flexibilidad en términos de consistencia interna de las ayudas del primer pilar para evitar la desestabilización del sector y las zonas agrícolas.
En este sentido, han manifestado su deseo común de poder decidir no proporcionar derecho a pago a ciertas áreas específicas.
Han subrayado que pueden apoyar la orientación general de las propuestas de la Comisión para reforzar la componente ambiental con el fin de aumentar la legitimidad de la PAC, a condición de que se hagan ajustes para facilitar la aplicación y el cumplimiento por los agricultores, sin sobrecargar la producción agrícola.
En este contexto, quieren que la especificidad de los cultivos permanentes sea tenida en cuenta.
Los ministros han reafirmando la necesidad de mantener un marco de ayudas vinculadas a la producción en el primer pilar de la PAC con un presupuesto suficiente para afrontar los retos del sector específico.
En su declaración conjunta consideran que el segundo pilar de la PAC tiene una especial importancia que se debe conservar en el futuro para garantizar la viabilidad a largo plazo de las zonas rurales.
En relación a las inversiones para la mejora de los regadíos, han apoyado la financiación de estructuras que permitan la mejora de la eficiencia energética, la eficiencia hídrica, la regulación de la capacidad (a través de retenciones de substitución) y el uso de agua reciclada.
Han solicitado la adopción de disposiciones que permitan una mayor capacidad de respuesta en caso de crisis del mercado a través de instrumentos eficaces y subrayan la importancia de la reserva de crisis para el sector agrícola, propuesto por la Comisión, y la necesidad de preservar los créditos correspondientes en las negociaciones presupuestarias actuales.
Por último, han mostrado su interés en fortalecer el poder económico de los productores en la cadena de suministro, por lo que consideran que conviene que la aplicación del derecho de competencia tenga en cuenta las especificidades del sector agrícola y permita que las organizaciones de productores e interprofesionales desempeñen plenamente su papel".
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