Jueves 10 de Abril de 2025
Leído › 1052 veces

Hay dias más importantes que otros. Sin dudas.
En lo personal recuerdo claramente la tarde del Miercoles 29 de Septiembre 2010. Fue un día trascendental.
El entonces multimedio El Conocedor, encabezado por Fabricio Portelli realizó el "Exclusive Malbec Day" en lo que era Sofitel Arroyo (hoy CASA LUCIA) de la Ciudad de Buenos Aires.
Todo un día dedicado a MALBEC de ARGENTINA, que en esos dias era furor en todo el mundo. Éramos "The Next Big Thing".
Ese día fue trascendental porque a través de un amigo inglés, William Hancock, pude conocer en persona a una de las mayores celebridades para cualquier enófilo (profesional o amateur).
El gran Steven Spurrier, estaba en Argentina y estaba participando del día dedicado al Malbec.
Habían pasado ya casi 35 años del ya mítico "Juicio de Paris" y Steven estaba más vigente que nunca.
Pero, la idea de estas líneas no es hablar sobre Steven y como ese "Juicio" cambió el negocio del vino e instaló/creó una nueva categoría, "Los Vinos del Nuevo Mundo".
La idea de estas líneas es hablar del Malbec World Day.
Ese mismo día un muy diplomático Alberto Arizu Jr. en su carácter de Presidente de Wines of Argentina (WofA) nos informó a los presentes que en el 17 de Abril de 2011 se iba a realizar el primer "Malbec World Day".
La siempre brillante Lis Clement, era en esos días la Gerente de Marketing de WofA y habia planteado hacer los festejos en honor a la cepa que habia puesto a la Argentina en el mapa de los serios paises productores.
El Malbec llegó a Argentina en 1853 de la mano del francés Michel Aimé Pouget (1821-1875), un agrónomo contratado por Domingo Faustino Sarmiento para llevar adelante la dirección de la Quinta Agronómica de Mendoza.
Siguiendo el modelo de Francia, esta iniciativa proponía incorporar nuevas variedades de cepas como medio para mejorar la industria vitivinícola argentina. El 17 de abril de 1853, con el apoyo del gobernador de Mendoza, Pedro Pascual Segura, se presentó el proyecto ante la Legislatura Provincial con vistas a fundar una Quinta Normal y una Escuela de Agricultura. Este proyecto fue aprobado con fuerza de Ley por la Cámara de Representantes, el 6 de septiembre del mismo año.

Tal como dice el título, desde entonces han pasado 15 años y es un buen momento para analizar qué ha pasado desde entonces.
En esos dias el malbec volaba. Cada mes se vendía más tanto en el mercado doméstico como en las exportaciones.
No habia importador/distribuidor en el mundo que no tuviera "su" malbec.
Argentina estaba empezando a tener, año tras año, mejores puntajes en las publicaciones más influyentes, como Wine Advocate, Wine Spectator, Decanter, Steve Tanzer, etc.
Todavia festejabamos un "92 pts" como si fuera la Copa del Mundo, y ni soñábamos con tener 100 pts. Eso estaba únicamente al alcance de las bodegas más famosas, de las zonas más reconocidas del mundo.
Las fichas técnicas hablaban irremediablemente de "barricas de roble". Destacando meses de guarda, origen de barrica, tostado, etc etc.
A mayor cantidad de tiempo, mayor era el precio. Pensar en "vender un vino caro" sin barrica era algo ilógico, casi lindante con la deslealtad comercial.
Las bodegas más importantes, por nombre y/o calidad, todas contaban con un Enologo Asesor o Flying WineMaker como Michel Rolland, Paul Hobbs, Alberto Antonini, Isabel Mijares. Nuestros enólogos sabían, si, si, sabían mucho, pero mejor que el corte final lo hiciera alguien de afuera. Con roce internacional.
La botella pesada y el cocho largo eran sinónimos de calidad absoluta. Si al servir el vino uno perdía el dedo pulgar en la "picada" de la botella, era porque indiscutiblemente estaba por disfrutar de un elixir vínico.
Terroirs como Gualtallary, Paraje Altamira, Pampa El Cepillo, eran prácticamente desconocidos. Todo era Malbec de Mendoza. Punto.
La primera "clínica" sobre Gualtallary la realizó Patricio Tapia para Descorchados en Aldo´s de Buenos Aires en 2012.
Parece mentira, pero lo que quizás a otros paises les llevó siglos, en Argentina ocurrió en menos de 15 años.
La década de 2010 vio abrir las alas y despegar al vino Argentino a alturas incalculables.
Los Recursos Humanos son la clave del éxito o el fracaso de cualquier desarrollo. Y la camada de enólogos e ingenieros agrónomos que empezó a dirigir el camino del vino argentino fue, es y será inigualable.
No quiero nombrar a ninguno para no ofender a ninguno, pero los profesionales de la agricultura y enología de Argentina, empezaron a viajar y "hacer vendimias" en todas partes del mundo.
Adquirieron conocimientos como si fueran esponjas. Y al volver comenzaron a aplicar distintas "recetas". Se animaron a irse cada año a viñedos más radicales. O mayor altitud, o más al norte, o más al sur, o lugares impensados. Chapadmalal y Balcarce en la Provincia de Buenos Aires, Trevelin en Chubut, sólo por nombrar algunos.
Durante la década de 2010 se empezaron a romper todas las reglas. Y fue como si el inconsciente colectivo de la enología se hubiera unificado en un gran "Elijo Creer". Menos barrica, mas terroir. Menos trabajo en bodega, más trabajo en el viñedo. Levaduras autóctonas, vinos con "raspón". En 15 años se revolucionó todo.
Hoy en 2025, hay bodegas que ya no festejan si los vinos no tienen 95 puntos o mas. Y lo que era utópico, ya es una realidad. Nuestros Malbec han obtenido 100 puntos en Wine Advocate, Tim Atkin MW, Descorchados (Patricio Tapia), JamesSuckling.com, etc. Hemos obtenido muchísimos "International Trophy" en Decanter.
Es decir, el Malbec de Argentina ya juega en las grandes ligas mundiales.
Y no son cuestiones subjetivas. Es absolutamente objetivo.
No hay restaurant importante en el mundo que no cuente con un Malbec en su carta.
Cuando empecé a viajar a USA y UK para vender vinos en 2011 era sorprendente ver un vino por copa (by the glass) en WineBars o Restaurants.
Hoy sorprende que NO haya un malbec by the glass en un punto de venta "on premise". Y si eso ocurre es porque el consumidor lo reconoce y elige.
Creo que fuimos muy afortunados en que el Malbec se enamore de Argentina.
Parece chiste pero no lo es. En el comercio internacional hay puntos muy positivos:
- "Malbec" se puede pronunciar en cualquier idioma, ya sea inglés, alemán, japonés, coreano, chino, danes, etc, etc. Maaaalbék en USA. Malbequi en Brasil. Mhaal-véck en los paises asiáticos. Fácil de pronunciar. Fácil de pedir. Nadie pide lo que no puede pronunciar. (Carménère es mucho más difícil).
- El Malbec generalmente tiene un "ataque dulce". Por más que el vino sea absolutamente seco, el malbec tiene el "sweet attack" que lo hace muy placentero al paladar para del neófito y muy reconocible para el connoisseur.
Nuestros principales mercados de comercio internacional son Estados Unidos, Brasil, Canadá, Reino Unido. Paises donde lo "dulce" tiene una percepción positiva. Insisto el malbec es seco, pero sigue teniendo un placentero ataque dulce.

Comer un "Bife de Chorizo Argentino" en un restaurant New York, París o Londres, es un acto de fe. No hay forma de contar con la trazabilidad de ese pedazo de Carne.
Una 4x4 Amarok o Ranger que uno vea en cualquier del mundo, da orgullo por saber que es una camioneta producida en nuestro pais. Pero no dice en ningún lado visible "MADE IN ARGENTINA".
Pero el Malbec de Argentina, grita desde su etiqueta que es... ARGENTINO.
Sea en un supermercado, en una cadena de winebars, o sea en un restaurant 3 estrellas Michelin o en la selección de una aerolínea, si es Malbec, es Argentina. Y lo digo nuevamente.... lo grita desde la etiqueta! E insisto.... lo pide el Rey o sea el Consumidor.
Hoy hay muchas bodegas argentinas que venden sus vinos de alta gama a través de La Place de Bordeaux. A la par de los grandes Chateaux.
Nuevamente... El Malbec de Argentina juega en primera y en todas partes del mundo.
Por lo general uno suele pasar por alto las cosas que conoce y que son de todos los dias. Y cuando tiene la oportunidad de alejarse un poco y verlo desde otra perspectiva, suele sorprenderse.
¿A qué viene todo esto?
Viene de la pura realidad. Durante muchísimos de los viajes promocionales después de 2015, empecé a percibir cierto aburrimiento de los compradores sobre el Malbec.
Frases como "Sé todo del Malbec" o "Todos los malbec son iguales" o "para qué necesito otro Malbec" empezaron a ser cada vez más habituales.
Y por eso decidí visitar los puntos de venta con unos mapas muy útiles que desarrollamos junto a los Diseñadores Hernan Balducci y Josefina Garcia Figueroa.
Dependiendo el perfil del comprador le mostraba uno solo o directamente los tres.

A efectos que se sorprendiera del tamaño de Argentina y por consiguiente entendiera en un nanosegundo que si hay algo en Argentina es diversidad. Simplemente porque la extensión de nuestro territorio no nos da otra oportunidad.
¿Como puede ser que todos los malbec sean iguales? La Patria Vitivinícola se puede plantear entre Jujuy al Norte, Chubut al Sur (aunque en breve voy a escribir algo sobre lo que se viene en Tierra del Fuego). Al oeste cada uno puede elegir su provincia preferida sobre los Andes. Y al Este podemos nombrar a Entre Ríos o la Pcia de Buenos Aires.

Esa Patria Vitivinícola es equivalente a la mayoría de países de Europa. Duplica el territorio dedicado al vino en USA.
Los mapas son más que elocuentes. Hablan por sí solos.
Argentina tiene el tamaño de un continente. Y las zonas de produccion son radicalmente diferentes.
Esta diversidad no implica que no se pueda hablar de Identidad.

El Malbec de Argentina tiene identidad. Dependiendo la zona aparecerán notas más de ciruelas, o de violetas, pero siempre será Malbec, y absolutamente disfrutable.
Se me escapa la fecha, pero creo que fue durante 2012 o 2013, Alberto Antonini estaba presentando en un salon del Palacio Duhau de Buenos Aires los nuevos perfiles de los Altos de las Hormigas .
Hablaba del desafío de llevar al Malbec a otro nivel en el mundo. Y dijo algo que me quedó grabado a fuego.
Siempre le preguntaban que venía desde Argentina después del Malbec. Y su respuesta en su español de exquisito acento italiano era siempre la misma "Después del Malbec... simple viene MALBEC, MALBEC, MALBEC y mas MALBEC".
Y hablaba de la diversidad de zonas, regiones, alturas, suelos, estilos de enología, etc., etc., etc.
Hoy a 15 años del primer Malbec World Day, creo que cualquiera de nosotros sufre cuando un amigo extranjero nos pregunta "Quiero probar un malbec, cual me recomendas?".
¡Uff tengo 20 malbec para recomendarte!
Juanca Chavero hace dos Malbec Blancos (Reserva de los Andes y Callejon de la Brujas) que son excelentes. También un malbec llamado Celador que es Pedriel en una botella.
El Malbec de Malma llamado Charca La Papay en San Patricio del Chañar, Neuquén, es imbatible en precio/calidad y habla del terroir patagónico.
Me fascina la etiqueta, pero también el vino del Malbec "Nuevos Suelos" de El Porvenir de Cafayate en Salta.
Imbatible el Lopecito (Lopez) Malbec. De batalla absoluta. Engalana la mesa en la comida de todos los dias. Es la quintaesencia de la "Primera Zona". ¿Y el Rosado de Malbec de CASONA LOPEZ? Es un "dos botellas". ¡Imposible tomar una sola!
Pero Juan Pablo Diaz, enólogo de Lopez, junto a Nacho Pasman (5ta Generacion de la Familia Lopez), lanzaron un Malbec de Maipú llamado Universo Paralelo, añejado en barricas de Roble Francés de 250 y 500 litros provenientes de 3 bosques distintos, y que honra a la mejor zona de Agrelo (Calle Cobos y Ruta 7).
"Berna" Bossi Bonilla hace para Vinos del Potrero, un Malbec de Gualtallary llamado "El Debut" que lo pueden disfrutar principiantes y conocedores por igual. 100% Gualta, sin elitismos.
Pero cómo olvidar al Malbec Natural Biodinámico de Krontiras. Es pura fruta.
El Malbec "Desierto Pampeano" de la zona de 25 de Mayo, de La Pampa en la puerta norte de la Patagonia: Fruta, Frescura, Tension, etc.
¿Conocen a Elias Lopez Montero? Enologo Español con puntajes increibles en sus vinos de distintas partes del mundo. El Mabec de Rio Negro llamado Maria Victoria es sublime.
Ah y lo que hace Fede Isgro en Villa Corral, Valle de Calingasta San Juan? ¿Probaron el Nido del Tigre Tinto de Jardín Malbec?
Si tienen oportunidad prueben al mismo tiempo los 3 Malbec Single Vineyard de CASARENA. Tres terroirs de Luján de Cuyo: Naoki, Lauren, Jamilla. Como si fueran nietos, tienen personalidades absolutamente diferentes. Pero son de la familia.
Podría seguir así por cincuenta líneas más. Mejor paro acá. Cada uno tiene su "Scaloneta" de Malbecs.

A futuro creo que nos quedan dos desafíos que deben ser llevados al mismo tiempo y en canales paralelos pero con una estrategia unificada.
Tenemos que seguir vendiendo cada vez mas malbec. De todos los precios. De todas las regiones. Que se siga reafirmando en el mundo que el Malbec, es rico, y que es de Argentina.
Por otro lado, seguir premiumizando el Malbec.
Si uno quiere comprar el merlot más caro del mundo, puede comprar el Petrus por varios miles de euros.
Si uno quiere comprar el Cabernet Sauvignon más caro del mundo puede comprar un Cult Wine de Napa por miles de dólares.
Si uno quiere comprar el Pinot Noir más caro del mundo puede comprar un DRC por el valor equivalente a un automóvil.
Y podriamos seguir así con casi todas las cepas.
Cuando llegamos al Malbec, si uno quiere comprar el Malbec más caro del mundo... puede resolver el problema con apenas unos pocos billetes de 100 dólares.
Todavia no hubo una marca que haya logrado premiumizar un vino Malbec para que llegue estar en forma habitual en el mercado arriba de los 1,000 dólares.
Si lo logramos (como pais) seguramente sera como consecuencia de vender muchas botellas más económicas pero de excelente calidad. Es decir convenciendo a muchos consumidores de vino que su opción es beber Malbec dada vez de mejor calidad.
Como sea. Yo veo que en este festejo quinceañero del Malbec World Day hay muchísimos motivos para alzar la copa y festejar.
Estamos en un lugar que probablemente no soñábamos estar en 2011.
No tenemos que relajarnos. Hay que seguir promoviendo el Malbec de Argentina. Seguir invirtiendo tiempo y dinero.
Pero hay que mirar para atras, levantar las copas con Malbec (obvio) y brindar:
¡Gran Malbec de Argentina! Salud!
Martin Perez Cambet

Leído › 1052 veces