Zaragoza se prepara para el primer festival multidisciplinar: VinoSonic

El mundo del vino es un universo fascinante y extenso que no deja de sorprendernos. Cuando creíamos haberlo visto todo, llega VinoSonic, el primer festival multidisciplinar de vino, para mostrarnos que el vino puede ir mucho más allá de una copa. Organizado por la Denominación de Origen Calatayud, este evento promete ser una celebración excepcional de la cultura vinícola en armonía con el arte y la música.

Situado en Zaragoza, específicamente en el espacio del Centro Musical Las Armas, VinoSonic abrirá sus puertas el 1 y 2 de junio, ofreciendo una experiencia sin precedentes. ¿Pero qué hace a VinoSonic tan especial? Para empezar, su concepto. No se trata solo de degustar vinos excepcionales, sino de hacerlo mientras se disfruta de actuaciones musicales y exposiciones de arte. Queralt Lahoz y Fresquito y Mango, nombres que ya resuenan con fuerza en el panorama musical nacional, son solo el principio de un cartel que promete mezclar talento local con figuras reconocidas, creando un diálogo entre el vino y otras formas de arte.

Imagina un lugar donde los sentidos se amplifican, donde el sabor de un vino puede verse influenciado por la música de fondo o por una pieza de arte visualmente impactante. Esa es la magia de VinoSonic. Además, el festival se convierte en una plataforma para artistas emergentes y establecidos, tanto en la música como en las artes plásticas, ofreciendo un espacio donde la creatividad fluye tan libremente como el vino.

Pero VinoSonic no es solo una fiesta para los sentidos; también es una celebración de la diversidad y la calidad de los vinos de la DO Calatayud. Con una selección de bodegas participantes que incluye nombres como Bodegas Agustín Cubero, Bodegas Ateca y Bodegas Langa Hnos., entre otros, los asistentes tendrán la oportunidad de explorar una amplia gama de vinos que reflejan el terroir único de esta región. Catas temáticas programadas antes del festival ofrecerán un adelanto de esta experiencia, permitiendo a los participantes sumergirse en el mundo del vino de una manera íntima y educativa.

El festival no solo busca celebrar, sino también educar. Las catas guiadas y los talleres están diseñados para desmitificar el vino, haciéndolo accesible tanto para novatos como para conocedores. La idea es romper barreras, mostrando que el vino puede ser disfrutado por todos, independientemente de su nivel de conocimiento.

Más allá del vino y el arte, VinoSonic es un testimonio del poder de la comunidad. Al reunir a productores de vino, artistas y el público general, el festival destaca la importancia de apoyar lo local, celebrando la riqueza cultural y productiva de Zaragoza y sus alrededores. Es un recordatorio de que, en un mundo cada vez más globalizado, hay un valor incalculable en las experiencias compartidas que reflejan la identidad de un lugar.

VinoSonic promete ser más que un festival; será un encuentro sensorial donde el vino dialoga con otras expresiones culturales, creando un espacio único para la exploración y el disfrute. Con su enfoque innovador y su compromiso con la calidad y la diversidad, está destinado a convertirse en un referente dentro de los eventos dedicados al vino, marcando el inicio de una nueva forma de celebrar este producto tan arraigado en nuestra cultura.

Ahora, mientras esperamos que las puertas de VinoSonic se abran, solo queda anticipar los momentos únicos que viviremos, los vinos que descubriremos y las conexiones que crearemos en este encuentro sin precedentes entre el vino, la música y el arte.

Catas previas para calentar motores

Durante los días previos al festival, del 17 de abril al 29 de mayo, diferentes catas temáticas abrirán boca al resto de la actividad. Dirigidas por bodegas de la DO Calatayud, tendrán lugar en el Restaurante Las Armas. Con aforo limitado, para participar será necesario adquirir entrada anticipada.