Una campaña récord en velocidad y calidad

Claves del éxito en la vendimia 2023 de DO Binissalem

Viernes 29 de Septiembre de 2023

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Este viernes, 29 de septiembre de 2023, después de 52 días de arduo trabajo, se ha dado por concluida la vendimia en la DO Binissalem. Esta campaña ha sido reconocida como una de las más veloces registradas en la historia de la comarca.

El inicio de la vendimia, que tuvo lugar el 9 de agosto, no varió mucho en términos de fechas habituales para las variedades de uva tempranas como Chardonnay o Moscatel. Sin embargo, este año la vendimia comenzó con la variedad Syrah, lo que resultó ser una novedad.

Es bien sabido que las condiciones climáticas juegan un papel determinante en el ciclo de crecimiento de la vid. Factores como la brotación, floración, cuajado y maduración de la uva, así como el proceso de vendimia en sí, están estrechamente ligados a la meteorología.

Con base en la información proporcionada por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), los meses de marzo y abril resultaron ser especialmente cálidos y secos en la región de Baleares. Se reportaron anomalías térmicas de +1,4 y +0,8 °C, respectivamente. Ante estas condiciones y con el conocimiento acumulado de campañas anteriores, el pleno del Consejo Regulador autorizó el riego, recomendando a los viticultores un uso adecuado para garantizar la máxima calidad del fruto.

Al llegar el verano, las anomalías térmicas continuaron siendo positivas. Junio fue particularmente cálido, con una anomalía de +1,1 °C y notable humedad. Julio, por su parte, fue extremadamente cálido, con una anomalía de +2,2 °C y seco. Agosto presentó condiciones más suaves, con una anomalía térmica de +0,4 °C. Afortunadamente, las precipitaciones durante agosto y septiembre no impactaron significativamente la región. En municipios clave de la DO Binissalem como Santa Maria del Camí, Sencelles, Santa Eugènia, Consell y Binissalem, no se reportaron lluvias torrenciales ni granizo, garantizando así la calidad y cantidad de uva.

La incidencia de enfermedades fungosas como el mildiu y oídio ha sido prácticamente inexistente, lo que asegura la salud y calidad de la uva recolectada. A pesar de las variaciones en temperatura y precipitaciones, las variedades locales han mostrado una resistencia y adaptabilidad impresionantes, conduciendo a una vendimia de gran calidad. Esta cosecha ha ofrecido uvas con un grado de maduración óptimo para la elaboración de vinos de alta calidad.

En términos de producción, se reporta una recolección de 1.403.405 kg de uva destinada a la elaboración de vinos bajo la DO Binissalem. Esto representa un crecimiento del 12% respecto al año anterior.

De esta cantidad, el 71% corresponde a variedades tintas y el 29% a variedades blancas. Es relevante mencionar que las variedades locales conforman el 69% del total, y salvo la Gargollassa, todas han visto un incremento en su producción.

Las variedades tintas, en especial el Manto negro con un incremento del 36% y la Callet con un 41%, han mostrado un rendimiento superior. Por el lado de las variedades blancas, la Moll aumentó un 5,60% y la Giró ros un 13,60%. Sin embargo, hubo una reducción en la producción de variedades como Chardonnay (-19,16%) y Moscatel (-40,96%).

La DO Binissalem cuenta con 12 bodegas y 105 viticultores que trabajan en un total de 578 hectáreas de viñedo. El conocimiento y experiencia de estos profesionales permiten la elaboración de vinos distintivos, con una personalidad única otorgada por las variedades locales.

Desde el Consejo Regulador de la DO Binissalem, se llevan a cabo esfuerzos constantes para promover las características de la región y sus vinos. Actualmente, se está trabajando en un proyecto para incluir nuevas variedades locales minoritarias en el Pliego de condiciones, como Escursac, Callet negrella o Esperó de Gall, siempre buscando potenciar la calidad y singularidad de los vinos de la DO.

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