Ideas para decorar la Navidad con vino

No hemos tenido más remedio que reinventarnos y cambiar nuestras costumbres y hábitos de vida. Pero hay tradiciones que, como la Navidad, nos cuesta más el 'remodelarnos'. A continuación, os dejamos algunas ideas para reciclar la Navidad, con vino.

Javier Campo

Lunes 28 de Diciembre de 2020

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Ya tenemos encima la Navidad. Estamos un poco flojos de pasta, pero la ilusión de estas fechas persiste a pesar de las limitaciones en la movilidad y en el número de personas que podemos juntarnos. Se valoran las acciones personales más que las "compradas" y, como buenos amantes del vino, podemos jugar reciclando y haciendo motivos navideños.

La primera y más fácil es decorar vuestra casa o la de vuestros seres queridos con botellas de vino vacías y sin etiqueta y ponerles esos tapones de los que salen unas guirnaldas de led y que dan un toque cálido y de luz. Tanto en la mesa como en cualquier rincón y teniendo en cuenta que la mayoría de las botellas son verdes, tendremos un regalo con la luz de la esperanza.

Las botellas no tienen porque tener luz. Se pueden pintar con los típicos rojo, blanco y verde navideños o con toques brillantes de purpurina. Vestirlas con fieltro o goma eva como si fueran fofuchos también da mucho juego, con forma de Papa Noel o de los Reyes Magos o de Elfo.

Para los menos manitas, podéis cortar las botellas a diversas alturas y jugar con velas haciendo candelabros.

Con respecto al árbol de navidad, las ideas son muchas, pero vamos a simplificarlo con tapones de vino espumoso que podemos pintar de blanco con rallas verde o rojas y un bonito lazo, para adornar cada una de las ramas de nuestro abeto particular. Los coleccionistas podéis colgar esas mini botellas de minibar de todos vuestros viajes y colgarlas con un letrero personalizado a quien la queráis regalar.

Las cajas de madera pueden ser perfectamente el Portal de Belén y, aquí podemos jugar mucho con la imaginación porque podemos hacer un Belén con botellas pintadas de varios tamaños y formas. Y la otra opción es los tapones de corcho. Con los tapones de corcho y rotuladores puedes hacer un Belén de esos que hacen historia. Tus mejores aliados para esta última idea son los palillos de dientes, rotuladores, trozos de tela, el algodón y una pistola de silicona.

Hacerle una cuna al niño Jesús con media barrica me parece excesivo para poner en el medio del comedor, y no quiero pensar que deberíamos hacer para recrear a la mula y el buey.

Las posibilidades son muy amplias y las fotografías de ideas que pululan por la red son casi infinitas. Así que ponedle imaginación al tema y reciclemos esta Navidad con cosas, de vino.

Javier Campo
Sumiller y escritor de vinos
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