Martes 23 de Septiembre de 2025
Bodegas LA HORRA, situada en la Ribera del Duero, ha presentado este mes de septiembre las nuevas añadas de sus vinos CORIMBO 2022 y CORIMBO I 2018. El acto se produce tras la inauguración oficial de su nueva bodega, diseñada por la arquitecta Carme Pinós, Premio Nacional de Arquitectura, que tuvo lugar el pasado mes de junio. Esta nueva instalación acoge ya los vinos desde la cosecha 2024 y representa un paso importante en la consolidación del proyecto iniciado por la bodega en 2009.
La filosofía de Bodegas LA HORRA se basa en el respeto al entorno y en la búsqueda de la identidad local a través de la variedad tinta fina. La bodega cultiva sus viñedos bajo criterios ecológicos y apuesta por una integración total en el paisaje. Además, mantiene varias líneas de investigación para mejorar la percepción de la tanicidad en los vinos y evitar la astringencia, así como un proyecto para recuperar la biodiversidad de la tinta del país en el entorno de La Horra. Desde hace más de diez años, seleccionan material vegetal entre las viñas viejas de tempranillo para preservar las características propias de esta uva.
CORIMBO 2022 es un vino certificado como ecológico desde la añada 2020. Procede de una cosecha marcada por un invierno frío y seco, seguido de una primavera con lluvias y temperaturas bajas. La brotación fue tardía, pero el calor de mayo y junio adelantó el ciclo vegetativo. El verano resultó muy caluroso, con temperaturas superiores a los 40ºC en julio y ausencia total de lluvias. A pesar de estas condiciones, el vino muestra una frescura notable. En nariz predominan los aromas a fruta roja madura y fresca, acompañados por notas sutiles de madera y hierbas aromáticas propias del entorno. En boca se perciben cerezas y moras, con un tanino vivo y pulido. El precio recomendado es de 25 euros.
Por su parte, CORIMBO I 2018 se elabora con uvas procedentes de viñedos viejos plantados en vaso, con más de 60 años de antigüedad. Esta añada corresponde a un año frío y lluvioso que permitió una brotación en fechas habituales, aunque algunas heladas causaron daños moderados. El verano fue frío y seco, pero las reservas hídricas del suelo permitieron una maduración equilibrada. La vendimia se realizó entre el 21 de septiembre y el 16 de octubre. Este vino presenta aromas a ciruela, mora, cereza y guinda, junto a notas minerales derivadas de los suelos calizos. En boca combina volumen con delicadeza gracias a una fruta potente y un tanino fino y fresco. El precio recomendado es de 50 euros.
La nueva bodega ocupa 4.700 metros cuadrados al borde de un pinar en la parte norte de la finca, que suma 25 hectáreas entre viñedos y bosque. El edificio está inspirado en la arquitectura tradicional local e integra criterios sostenibles tanto en su construcción como en su funcionamiento diario. Las instalaciones incluyen zonas para elaboración, crianza en barrica, botellero, exposición y venta directa. Las antiguas naves se utilizan ahora como centro logístico y área de expedición.
Con estas nuevas añadas y su renovada infraestructura, Bodegas LA HORRA refuerza su apuesta por vinos que reflejan fielmente el paisaje ribereño y mantienen un compromiso firme con la sostenibilidad ambiental y la innovación técnica dentro del sector vitivinícola español.