“Bernardo me propuso unir fuerzas y proyectos, no lo dudé”

Vicente López y Bernardo Ortega, cofundadores de Vinos Simbiosis han llevado a la bodega conquense a lo más alto con una visión enfocada en la tradición y la calidad. Elaboran vinos artesanales que reflejan la historia y el paisaje de La Manchuela.

David Manso

Viernes 09 de Agosto de 2024

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Vicente López Soler, de Vinos Simbiosis

Los vinos de Simbiosis, bodega regentada por dos jóvenes manchegos en la localidad conquense de Casas de Santa Cruz, ha obtenido un notorio reconocimiento en la XXX Edición del Concurso de Vinos organizado por la Diputación de Cuenca. Sape 2022 Syrah y Simbiosis 2022 Bobal, dos vinos de autor elaborados con métodos artesanales en tinajas de barro bajo velo de flor les han llevado a hacerse con el primer y el tercer premio respectivamente en la categoría de vinos Tintos Jóvenes.

Dos son también los socios que forman Vinos Simbiosis, los enólogos Bernardo Ortega Sarvisé y Vicente López Soler. Entrevisto a este último para conocer más de su trabajo y las claves del éxito que les han llevado hacerse con el reconocimiento a sus vinos en el reciente concurso.

Durante tu trayectoria profesional has trabajado como enólogo en varias bodegas alrededor del mundo y en lugares tan distintos como Nueva Zelanda, Inglaterra o Napa Valley.  Después de conocer tantas regiones vitivinícolas. Qué hizo que te decidieras por afincarte en tu tierra natal para elaborar vinos?

Antes de salir a colaborar en distintas bodegas alrededor del mundo ya tenía claro que me gustaría darle el valor que se merece a mi querida tierra tan infravalorada. Desde pequeño observé que todo el esfuerzo  y sacrificio de un año entero acababa teniendo una rentabilidad cuestionable. El objetivo principal es hacer un cultivo rentable y sostenible con el que poder transmitir nuestra cultura vitícola a través de nuestros vinos de paisaje.

Junto a tu socio Bernardo, fundáis Vinos Simbiosis. Cómo surge el proyecto?

Bernardo y yo nos conocimos hace ya 10 años. Él comenzó su pequeño proyecto de garaje con los vinos Simbiosis trabajando con variedades autóctonas en el 2017. En 2022 gracias a esta pequeña bodega en casas de Santa Cruz iba a poder desarrollar mis proyectos, y Bernardo me propuso unir fuerzas y proyectos, no lo dudé ya que como profesional y persona es excepcional.

Elaboráis vinos de autor, de manera artesanal, usando los mismos métodos que han sido empleados en estas tierras durante generaciones, como se diría "a la antigua usanza". Qué os llevo a decidiros por elaborar este tipo de vinos?

Desde que empecé a beber vino hace ya unos años, sentía que todos los vinos se parecían  mucho entre ellos y para mí, lo importante siempre es diferenciarte de los demás y  ser uno mismo, transmitiendo lo que se siente: naturaleza, artesanía y tradición, respetando al máximo el viñedo, sin añadir productos químicos en el campo y por supuesto con elaboraciones en bodega lo más naturales posible.

Villarrobledo, un pueblo que exportaba tinajas hace 200 años y en el siglo 21 se habían olvidado sustituyéndolas por acero inoxidable. Ese era el camino, recuperar las tinajas olvidadas y la forma tradicional de elaborar vino.

Vinos Simbiosis combina tradición y modernidad

De qué hablan vuestros vinos, qué queréis transmitir con ellos?

Hace un siglo La Manchuela, al igual que muchas otras regiones de España, estaba profundamente arraigada en sus tradiciones agrícolas y vinícolas. Durante esta época, la viticultura era una parte esencial de la vida rural. Las familias viticultoras seguían prácticas heredadas de sus antepasados, utilizando métodos manuales y rudimentarios en la producción del vino. Este vino de tinajas transmite no solo la historia de la región, sino también las costumbres de una época en que la vendimia era un evento comunitario, con familias y vecinos trabajando juntos en los viñedos.

Hace un siglo, el respeto por el terruño era implícito en las prácticas agrícolas. Los viticultores de La Manchuela dependían de su conocimiento íntimo del clima y del suelo para cultivar sus viñas. Este vino artesano refleja el entorno natural de la región tal como era en esa década, cuando la agricultura orgánica y sostenible era la norma por necesidad, más que por elección.

La elaboración del vino combinaba la habilidad artesanal con los conocimientos empíricos. Los enólogos de la época confiaban en su experiencia y en las técnicas transmitidas oralmente. Nuestros vinos transmiten esa fusión de arte y ciencia que caracterizaba la producción vinícola de la época. Con su envejecimiento en tinajas, transmiten la paciencia y el cuidado de una época en que el tiempo era un componente esencial en la elaboración del vino. Sobre todo evocan una época en la que la vida giraba en torno a la tierra, y el vino era un símbolo de unión y celebración.

David Manso
Licenciado en Marketing y apasionado del vino.
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