El arte del coupage

Mezcla, blend, coupage o assamblage son términos del argot viníclola de uso frecuente, que empleamos para referirnos al ensamblado de vinos de diferentes variedades, parajes o barricas, con el fin de mejorar sus atributos sensoriales. Pero ¿es posible ensamblar vinos de diferentes añadas?

La mezcla de vinos es un ejercicio habitual y rutinario en las bodegas. Una práctica en las que, valiéndose de diferentes fracciones o lotes, diferenciados por variedades y vinificación, se logran obtener vinos más equilibrados, complejos y armoniosos que cada uno de estos lotes por separado. Un trabajo exquisito de pipeta, probeta y cata, realizada por enólogos a la sombra de la luz pálida del laboratorio.

Hace unos días tuvimos la oportunidad de catar SINE-FINE Tercer Año "en primeur", un singular vino extremeño nacido de un ensamblaje de añadas que, más allá del paradigmático Vega-Sicilia Reserva Especial y sus tres añadas ensambladas, representa un rara avis en el mercado. Una circunstancia que ha despertado el interés y la curiosidad de profesionales.

Un singular vino elaborado «siguiendo una crianza dinámica, en la que vinos de distintas añadas y niveles de envejecimiento son metódicamente ensamblados, con el fin de perpetuar determinadas características». Una concepción que asemeja a los dinámicos vinos del Marco de Jerez o de los estandarizados vins de réserve de Champagnes, aunque más allá del método, pocas similitudes comparten con estos.

Pocos referentes encontramos en el mercado, aparte de los ya mencionados, pues lejos quedan los hoy día desaparecidos CVC riojanos (Conjunto de Varias Cosechas), para los que se permitía la mezcla de vinos procedentes de varias añadas, aunque si finalidad era más para "adobar" vinos de calidad dudosa, que la de ensalzar virtudes o preservar atributos; La única referencia en esta línea de vinos de "coupage de añadas", nos las aportó José Peñín en un artículo en este medio. Se trata de un vino de Long Island (NY), de James Christopher, llamado Over and Over Variation "seven", cuyo planteamiento pudiera recordar al novísimo vino extremeño.

Sea como fuere la fuente de inspiración, SINE-FINE representa una añeja novedad —no sólo para el panorama enológico extremeño, sino a nivel nacional— alejada de toda corriente y tendencia comercial, cuya concepción, estilo y presencia nos ha fascinado.

NOTA DE CATA

Vino: SINE-FINE Primera Edición

Añada: Sin añada ("Tercer Año")

Procedencia: Extremadura

Variedad/es: Monastrell, Cabernet Sauvignon, Tempranillo y otras

Valoración: Vino de capa media-alta, de color rojo picota y ribete rubí. En nariz, presenta una alta intensidad aromática, dominado en primera instancia por las notas propias de su vejez (madera vieja y balsámicos) y evolución (resinas y recuerdos de farmacopea), para cambiar con la aireación hacia las notas de fruta roja muy madura, maderas finas y cremosas. Un vino de enorme complejidad, que nos sorprende por su amplio espectro aromático.

En boca, posee una entrada vertical que arrastra el vino hacia el final de la misma, dejando a su paso un despliegue de taninos arenosos que llena cada oquedad, lo que prolonga el gusto y regusto del trago, dejando una sensación cálida, frutal y equilibrada.

Aunque catado directamente de barrica (muestra de 40ml), lo que es pronto para valorarlo, nos ha fascinado su rica acidez y contenidos en polifenoles, los cuales creemos necesarios y suficientes para un reposo más o menos prolongado en botella, para la que auguramos una mejora exponencial en sus primeros años.

Precio: 30€ a 40€

Valoración: 93-95/100