Kabuki Madrid redefine el brunch navideño con cuatro actos de alta gastronomía

Kabuki Madrid estrena su nuevo Brunch Navideño, una cita disponible todos los domingos hasta el próximo 4 de enero, incluido. Una propuesta de cuatro actos diseñada por el chef Alejandro Durán que lleva el concepto de brunch a un terreno más técnico, preciso y definitivamente Kabuki. Sin duda, un recorrido pensado para quienes buscan un brunch que va mucho más allá de lo habitual.

Este brunch gastronómico refleja el alma de Kabuki Madrid, restaurante galardonado con una estrella Michelin y un Sol Repsol. El menú abre con el sakizuke, un bocado pensado para marcar el tono: la Senbei Toro, una galleta de arroz crujiente con ventresca de atún y salsa mexicana pastor que combina textura, grasa y frescor con una limpieza muy japonesa.

El segundo acto, otsukuri, pone el acento en el corte y el equilibrio. El ya icónico Pa amb Tomaquet de ventresca, el Gyutataki —lomo bajo apenas marcado con ponzu, ajo confitado y cebolleta fresca— y el tartar de aguacate picante conforman un trío que alterna profundidad, acidez y notas vegetales sin perder precisión. Es, probablemente, el bloque más reconocible del lenguaje Kabuki.

En el shusai, el comensal elige entre cinco platos principales. La cazuela de setas y arroz de sushi frito con salsa sukiyaki destaca por su perfil umami; la selección de seis piezas de sushi muestra el dominio del corte y la maduración; los Chilli Jam Noodles equilibran wok, langostino y picante suave; y las dos versiones de fluffy pancakes —matcha con helado de coco-lima o saladas con huevo poché y jamón Joselito— aportan textura y contraste sin caer en excesos dulces ni grasos.

El cierre, más directo y sin artificio, llega con los rosquetes de calabaza con chocolate Valrhona 70%, un postre que combina tradición con un acabado técnico pulido.

En el apartado de bebidas, el brunch incluye Mimosa-ke o copa de Champagne Taittinger Brut Réserve, además de agua, refresco o cerveza, y un Matcha Latte o café. Un acompañamiento medido, pensado para no eclipsar el menú. El precio es de 65€ por persona.