Genovés: la buena mesa con sabor a tradición y modernidad

Genovés ofrece una experiencia culinaria inolvidable con platos tradicionales reinterpretados

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Jueves 27 de Marzo de 2025

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Visitar Genovés no es solo salir a comer, es embarcarse en un viaje culinario donde la tradición se encuentra con la creatividad, y cada bocado es un homenaje a la cocina de bodegón con un giro contemporáneo. Ubicado en el corazón de un polo turístico y gastronómico, este restaurante no es un simple lugar de paso: es un destino en sí mismo.

Mi historia con su chef, Pablo Greco, tiene raíces profundas. Lo conocí gastronómicamente en Zirkel, donde su cocina ya me había conquistado con un plato que se convirtió en un clásico para mí. Por eso, la emoción de reencontrarme con su propuesta en Genovés era doble: la de volver a disfrutar de su talento y la de descubrir su evolución en este nuevo espacio.

El alma de Genovés: la cocina de Greco

El ambiente de Genovés te abraza con esa calidez tan característica de los bodegones, pero con un aire renovado. Aquí, la cocina tradicional argentina e italiana se reinterpreta con respeto y originalidad.

Uno de los puntos fuertes de la carta es la posibilidad de degustar platos que, por lo general, asociamos a fechas especiales, durante todo el año. ¿Vitel toné en cualquier estación? Aquí es posible. ¿Una lengua a la vinagreta tibia, laqueada al horno de leña y acompañada de una criolla agridulce? Un lujo inesperado.

El cerdo a la riojana, con puré de arvejas a la menta y papas crocantes, es un ejemplo perfecto de cómo un plato clásico puede refrescarse sin perder su esencia. Y la parrilla es otro de los grandes protagonistas: carnes maduradas, la impresionante ceja de 900 gramos para compartir, y un Josper que aporta un sutil toque ahumado a guarniciones y postres.

Pastas, postres y un maridaje de primera

Las pastas en Genovés merecen una mención especial. Desde los ñoquis de sémola a la romana hasta los Conchiglioni Gamberi, con langostinos y brunoise de vegetales, cada plato está pensado para resaltar los sabores y texturas de ingredientes de primera calidad.

Y si hablamos de postres, los golosos encontrarán su paraíso: banana split con un toque especial, queso y dulce reinventado con gouda, cayote, pimienta y oliva, y un panqueque de manzana flambeado al rhum con helado de crema que cierra cualquier comida con broche de oro.

La selección de vinos acompaña a la perfección la propuesta, con etiquetas clásicas y opciones para quienes buscan descubrir nuevas armonías. La barra de tragos, por su parte, complementa la experiencia con cócteles que van desde lo tradicional hasta creaciones originales.

Un rincón único en un barrio con encanto

Genovés es un punto de encuentro donde la buena comida se disfruta en compañía, ya sea en familia, con amigos o en una comida de negocios. Su ubicación privilegiada, en una zona pintoresca de la ciudad, lo convierte en un destino ideal tanto para locales como para turistas que buscan autenticidad y sabor.

Además, el entorno es inigualable: La Boca, con sus calles coloridas, su historia y su energía vibrante, le da un marco especial a la experiencia. Desde algunas mesas se pueden apreciar vistas a la Bombonera, recordándonos que estamos en uno de los barrios más emblemáticos de Buenos Aires, donde la pasión se vive en cada rincón.

Genovés es el tipo de lugar que, una vez que lo probás, sabes que volverás. Porque hay restaurantes que se visitan, y otros que se convierten en parte de tu historia.

Un artículo de Jocelyn Dominguez
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