Agua que no has de beber...

El refranero siempre nos lleva por caminos insospechados. Pero en este caso parece que haya sido así ya que, las aguas premium están olvidadas cuando hace tan solo una década era lo más 'cool' en las cartas de los restaurantes

Javier Campo

Lunes 09 de Septiembre de 2019

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En algunas tiendas y restaurantes, las aguas siguen ocupando un lugar, pero cada vez más pequeño si tenemos en cuenta que se han "pasado de moda". Recuerdo que más o menos en el 2005 hubo un "boom" que duró unos tres años y que colocó las aguas en el punto más alto de la gastronomía ya que se hacía imprescindible tener un buen elenco de aguas al lado de la carta de vinos y destilados.

Una especie de fiebre líquida se mezclaba con el esnobismo de haber probado esta u otra agua de la que obviamente había que guardar prueba en forma de foto o coleccionando las más que vistosas botellas. Botellas por las que se pagaban, y pagan aun, verdaderas fortunas si tenemos en cuenta que el contenido es mucho más barato que el continente.

"Acqua di Cristallo tributo a Modigliani" de 75cl. tiene un precio de 52.700 €, el agua es de las Islas Fiyi y la botella está fabricada con oro sólido de 24 quilates. También contiene 5 miligramos de polvo de oro para beber diluido en el agua.

Los diseños exclusivos de grandes firmas, la incrustación de pedrería en la botella, la combinación con metales preciosos o las ediciones para coleccionista convirtieron al agua en artículo de lujo para muchos.

La botella de la marca Bing está hecha con cristales de Swarovski, vale 35 euros.

El método de obtención y las propiedades de cada tipo de agua pasan a segundo plano ante la belleza de la botella, cuando en realidad, y tirando otra vez de refranero, lo importante está en el interior. Si repasamos algunos métodos de obtención de agua de los muchos que hay, nos daremos cuenta de las enormes diferencias que existen entre aguas embotelladas y que propician que incluso se puedan hacer catas con diferencias muy marcadas y maridajes ciertamente complejos por los matices y estructura.

Podemos partir diferenciando las aguas con gas y sin gas, que sería lo más fácil, aunque dentro de ambas también encontramos subdivisiones. Probablemente, lo que más conocemos es el agua mineral de suele provenir de un yacimiento subterráneo y que, en muchos casos, suele brotar espontáneamente de manera natural en lo que conocemos como manantial. Cada una de estas aguas minerales de manantial (o no) suelen tener propiedades químicas que las hacen diferentes entre ellas ya que cada entorno geológico es diferente.

En ocasiones, de estos manantiales brota el agua con una pequeña cantidad de gas en las aguas naturalmente gasificadas, aunque hoy en día casi todas las aguas gasificadas contienen carbónico añadido en una u otra proporción. Este tipo de aguas también podrían incluirse en el subtipo de aguas preparadas. Las aguas preparadas son todas aquellas que sufren un proceso básico de potabilización o de extracción de residuos no deseados. Esto pasa con muchas aguas del mercado por no decir que casi todas.

Aguas purificadas

También podríamos considerar las aguas purificadas como aguas preparadas ya que se someten a un proceso de desalinización, osmosis, destilación o desionización entre otros procesos. Y que no os suene raro que todo esto lo tenemos al alcance en cualquier supermercado. Solo hay que leer un poco la etiqueta.

El agua de glaciar, el agua de oasis, el agua de lluvia, el agua de pozo artesiano, el agua metálica, el agua de la eterna juventud... todo eso lo podemos leer en la descripción o ficha técnica del agua en cuestión.

Independientemente de las propiedades de cada una de las aguas que podemos encontrar en el mercado, la función básica del agua es hidratar y quitar la sed. Depende muy mucho del bolsillo que la sed la apagues con agua del grifo o con una botella de 50.000 €. ¿A ver si te quita la sed para siempre? Pues un servidor no sabe si quita la sed o no, pero desde luego lo que, sí que se te quita, es las ganas de beberla.

Javier Campo
Sumiller y escritor de vinos
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