La evolución de un clásico riojano

La historia de Viña Arana es, sin lugar a dudas, la crónica de un viaje fascinante a través del tiempo, que comenzó hace ya medio siglo. Desde sus primeros pasos en 1974, este vino ha sabido adaptarse, evolucionar y sobresalir en el mundo del vino, convirtiéndose en un verdadero símbolo de excelencia y tradición. La celebración de su 50 aniversario no es solo un hito para la bodega La Rioja Alta, S.A., sino también un momento de reflexión sobre cómo un vino puede encapsular la esencia de su tierra, historia y la pasión de quienes lo elaboran.

El cambio de nombre de 'Sexto Año' a Viña Arana no fue simplemente una cuestión de marketing o rebranding; representó un nuevo capítulo en la historia de la bodega, marcando el inicio de una era donde la calidad, la identidad y la expresión del terroir tomaron un nuevo significado. Nombrado en honor a José María de Arana y Aizpurua, el entonces vicepresidente, Viña Arana se ha convertido en el estandarte de un estilo de vino que trasciende las modas y las expectativas comerciales.

Desde sus inicios, Viña Arana se distinguió por una propuesta única que lo diferenciaba de otros vinos de la región. La influencia de los enólogos bordeleses en Haro, que introdujeron el estilo 'Rioja Claret', dejó una huella imborrable en la filosofía de elaboración de Viña Arana. Este estilo, caracterizado por su elegancia, finura y capacidad de guarda, se convirtió en la firma de Viña Arana, diferenciándolo de los vinos más robustos y potentes de otras áreas de la denominación.

La evolución de Viña Arana desde sus primeros días, presentándose como 'Crianza de Rioja' hasta alcanzar la categoría de 'Gran Reserva', es testimonio de un compromiso inquebrantable con la calidad y la excelencia. La decisión de La Rioja Alta, S.A. de elevar Viña Arana a Gran Reserva en la añada 2012 fue un movimiento audaz, pero meditado, que reafirmó su posición como una bodega líder en la producción de vinos de alta gama.

El enólogo Julio Sáenz destaca la constancia y la evolución de Viña Arana como claves de su éxito. En un mundo que a menudo persigue las tendencias del momento, Viña Arana ha mantenido su identidad, apostando por la elegancia, la sedosidad y una suave acidez que le han ganado el respeto y la admiración de aficionados y expertos por igual. La capacidad de este vino para mejorar con los años es un testimonio de la visión y el saber hacer de sus creadores.

El lanzamiento de la cosecha 2016 de Viña Arana Gran Reserva coincide con el 50 aniversario de la marca, ofreciendo a los aficionados la oportunidad de experimentar la profundidad, la tipicidad y la persistencia de un clásico contemporáneo. Elaborado con un 95% de uvas Tempranillo y un 5% de Graciano, este vino representa la culminación de décadas de dedicación y pasión por la viticultura y la enología.

La celebración del 50 aniversario de Viña Arana es un momento de júbilo no solo para La Rioja Alta, S.A., sino para todos los que aprecian el arte de la vinicultura. Este hito sirve como recordatorio de la importancia de preservar la tradición, al tiempo que se abraza la innovación, para seguir creando vinos que expresen la singularidad de su origen. Viña Arana no es solo un vino; es una leyenda viva que continúa deleitando a generaciones de amantes del vino alrededor del mundo.