Mientras otros reducen, Toscana crece

El sector vinícola de la Toscana se prepara para un importante crecimiento con la ampliación de 639 hectáreas de viñedos. La Región Toscana ha anunciado que está a punto de aprobar el listado de las 818 empresas beneficiarias de las nuevas autorizaciones para la plantación de viñedos, lo que permitirá a estas empresas expandir su producción vitivinícola en los próximos tres años. La medida, gestionada en conjunto con el Ministerio de Agricultura, responde a una demanda total de 4.877 hectáreas, aunque la cuota asignada a la Toscana representa solo el 1% de la superficie total de viñedos de la región.

Stefania Saccardi, vicepresidenta y responsable del área agroalimentaria de la región, señaló que este paso ha sido largamente esperado por los viticultores toscanos, quienes veían necesario un aumento en la capacidad productiva de sus tierras. Desde la región, se había instado al Ministerio en varias ocasiones para acelerar las fases preliminares del proceso, dado que esta expansión responde a las necesidades de los productores locales de aumentar su superficie cultivada.

Las empresas que han recibido autorizaciones menores al 50% de lo solicitado podrán renunciar a las mismas en un plazo de 30 días, utilizando el sistema informático de la Agencia para las Erogaciones en Agricultura (Agea). A partir de ese momento, Artea se encargará de registrar las autorizaciones definitivas en el registro telemático, excluyendo aquellas que hayan sido renunciadas. Sin embargo, se ha recordado a los productores que estas nuevas plantaciones no podrán beneficiarse de las ayudas vinculadas a la reestructuración y reconversión de viñedos.

La región de Toscana es reconocida mundialmente por sus vinos de alta calidad, con 58 indicaciones geográficas protegidas, entre ellas 52 denominaciones de origen protegidas (DOP), que incluyen 11 denominaciones de origen controladas y garantizadas (DOCG) y 41 denominaciones de origen controladas (DOC), además de 6 indicaciones geográficas típicas (IGT). Con más de 12.000 empresas vinícolas, la región se sitúa como la séptima en Italia por volumen de producción. A pesar de las dificultades globales que sufre el sector, la expansión de los viñedos en Toscana es una señal del buen estado de su industria vinícola, que continúa atrayendo a amantes del vino de todo el mundo gracias a la singularidad de sus paisajes y su historia vitivinícola.

Este movimiento refleja la estrategia regional de fomentar el crecimiento de su producción vinícola, contrastando con la situación en otras partes del mundo, donde la tendencia es la reducción o eliminación de viñedos. La Toscana, por el contrario, busca consolidar su posición en el panorama global del vino, apoyándose en su tradición y en el reconocimiento de sus productos en mercados internacionales.