El vino que nace de la intuición femenina en el campo

Los vinos brisados (también conocidos como 'orange wines'), vinos que han sido vinificados en contacto con las pieles durante varios días, han formado parte de la cultura vinícola de la comarca de la Terra Alta desde hace muchos siglos.

De hecho, era la forma más tradicional de elaborar los vinos hasta hace unas décadas, cuando nuestros antepasados ​​se guiaban con las fases lunares, tanto en el campo como en las bodegas.

Además de esta tradición, Herència Altés quiere poner en valor la intuición femenina en el campo y su energía cíclica en sintonía lunar. De hecho, son estas premisas las que han llevado a la bodega terraltina a presentar un nuevo vino brisado bajo el nombre de Llunari.

El Llunari es un 100% garnacha blanca, de color dorado intenso y con reflejos anaranjados. Un vino muy aromático, con recuerdos de membrillo verde y piel de naranja, hinojo y almendra. Fresco en boca y con un final con reminiscencia de almendras crudas.

En palabras de Núria Altés, propietaria de la bodega, "con este vino hemos querido expresar nuestra tradición, por un lado, vinculada a los vinos brisados, muy vinculados a nuestro territorio. Por otro lado, con el nombre queremos poner de relieve la importancia que la luna ha tenido durante siglos para la agricultura y, en este caso, para la elaboración de vino".

Se trata de un vino muy versátil, "si fuera una prenda de vestir, sería de esas que llamamos 'de fondo de armario' que puede acompañar multitud de ocasiones" comenta Núria Altés. Sin embargo, desde la bodega recomiendan maridarlo con platos de cocina tradicional en escabeche, como las sardinas o el pollo, ortigas rebozadas o con un ceviche de corvina.

La tirada del Llunari es bastante reducida —1.800 botellas— y se puede adquirir por 18,00€ en la misma bodega ubicada en la Finca Lo Grau del Inquisidor (Coll Del Moro), Ctra. N420 km798, Gandesa (Terra Alta) o en su tienda online.