Los retos de la distribución de vino en hostelería

La encrucijada actual está suponiendo un verdadero desafío para el sector de la distribución de vinos. Cuando ya parecía que se empezaban a dejar atrás las consecuencias que sobre todo el sector hostelero había generado la pandemia, en las últimas semanas nuevas circunstancias adversas dificultan el regular servicio de las bodegas al canal horeca a través de la distribución.

En un mundo cada vez más globalizado, las tensiones en la cadena de suministro de meses anteriores en sectores estratégicos, como el vidrio, el acero o los derivados del petróleo, se han visto agravados en las últimas semanas con la invasión rusa de Ucrania, en un contexto global, y los paros de los transportistas en España, en nuestro mercado interior.

Ante esta tormenta perfecta, ¿qué podemos aportar desde la distribución de vinos para intentar que la afectación a la hostelería sea lo menor posible?

En primer lugar, un factor clave es la diversificación de redes de distribución que combinan las flotas propias con los canales ya establecidos para intentar garantizar un suministro de manera lo más estable posible.  Además, para sustentar este compromiso en la continuidad del  servicio es imprescindible disponer de una plataforma logística con una elevada capacidad de almacenaje en óptimas condiciones, especialmente en cuanto al control de temperatura.

Otro elemento que en estas circunstancias tan volátiles puede ayudar a la hostelería en su provisión de vinos y destilados es la opción del picking, que permite al encargado de compras del establecimiento pedir las botellas por unidades, sin necesidad de completar cajas de 6 ó 12, práctica habitual en el sector.

Por último, la palanca que más valor crea y que da más coherencia al servicio que ofrece la distribución a la hostelería es el asesoramiento y la formación. Profesionales expertos que generan alternativas rápidas y eficaces, que transmiten argumentarios de ventas, que proponen alternativas en maridajes o temperaturas de servicio y que, en definitiva, sirven de cadena de comunicación del discurso de un vino entre el bodeguero y el cliente a través del sumiller.

Grupo Merino (www.distribucionesmerino.com) nace en la provincia de Cádiz en 1950, centrado desde su creación en la distribución de vinos y destilados a la hostelería. En la actualidad, cuenta con más de 4.000 puntos de venta de hostelería en las provincias de Cádiz, Sevilla, Málaga y Madrid, a los que hace llegar a diario sus más de 1.400 referencias de las que actualmente dispone en su catálogo. En los últimos años, ha apostado además por la creación de la primera bodega de cerveza del mundo, Sherry Beer, y la alianza estratégica con el enólogo Santiago Jordi para su colección conjunta de vinos, así como el marketplace de venta directa on-line a particulares de vinos y destilados www.encopa.es.

Álvaro Merino.

Director General Distribuciones Merino.