Un proyecto de investigación estudiará el uso de raspón de uva como alimento animal

Newfeed estudia el aprovechamiento del raspón de uva

El objetivo de este proyecto es promover la economía circular para reducir el impacto ambiental y los costes en la producción agraria. Para ello, tanto Bodegas BAIGORRI como el resto de socios del proyecto, demostrarán la viabilidad técnica y económica de recursos económicos alternativos a partir de subproductos mejorados de la industria alimentaria.

En el caso de Bodegas BAIGORRI, será el raspón de la uva el que conviertan en aprovechamiento como alimentación animal. 

Con ello se busca aumentar la sostenibilidad de la ganadería mediterránea a través de la valoración de los subproductos de la industria alimentaria.

Vendimia en Bodegas Baigorri

Coordinado por el centro tecnológico AZTI, este proyecto internacional se ha puesto en marcha al mismo tiempo en: Egipto, Grecia, España y Turquía. En el estado español cuenta también con la participación del centro tecnológico Neiker, la Confederación Española de Fabricantes de Alimentos Compuestos para Animales, (CESFAC), la Unión Agroganadera de Álava (UAGA), la empresa de proveedora de equipos industriales Riera Nadeu y Bodegas BAIGORRI.

Se validarán tres cadenas de valor diferentes para crear nuevas oportunidades de negocio:

• Valorización del raspón de la uva de las bodegas como alimento de segunda generación para producir un nuevo ingrediente alimentario para rumiantes (ovejas y vacas lecheras). El estudio se llevará a cabo en España.
• Valorización de la cáscara de naranja de las industrias de zumo de naranja para producir un ingrediente alimentario mejorado para rumiantes (ovejas lecheras). El estudio se llevará a cabo en Grecia.
• Valorización de la torta de aceituna de la industria del aceite de oliva para producir un ingrediente alimentario para aves de corral (pollos de engorde). El estudio se llevará a cabo en Egipto.

Raspones de uvas

Esta iniciativa forma parte de la apuesta de Bodegas BAIGORRI (Rioja Alavesa) por un proyecto sostenible desarrollado en los últimos años y que complementa la reciente implantación de placas solares fotovoltáicas en bodega, de forma que se integra la tecnología más moderna con el menor impacto ambiental. Además, la bodega apuesta por la iluminación LED (que ahorra un 40% de energía), utilizar etiquetas y cápsulas ecológicas, utilizar procedimientos para reducir el consumo de agua y usar productos naturales para aplicar y controlar enfermedades causadas por fitopatógenos.