PORTINOX revoluciona el mundo de la restauración con el vino de barril

Llevan más de tres décadas como líderes a nivel mundial en la fabricación de barriles para la cerveza. Con esta amplia experiencia, PORTINOX decidió, en 2014, aproximarse a nuevas industrias, como la del vino. Fue así cómo nació la actual revolución en mundo de la restauración: los barriles para vino.

Desde esta multinacional no tienen dudas. “El acero inoxidable es la mejor solución de embalaje. Si no, ¿por qué los grandes depósitos de las bodegas son de este material?”, indica el Director Comercial y de Marketing de nuevos mercados y productos estrátegicos de PORTINOX, Guillermo Rueda y Cabeza. En comparación con la botella de vidrio, los barriles para vino “aislan y protegen totalmente el producto del ataque de la luz solar, no se rompe y se puede reutilizar”, indica. En sus palabras, a las anteriores ventajas hay que añadir que se “evita la entrada de partículas, porque, al dispensarse simplemente accionando un tirador, no hay que emplear tiempo en abrir botellas ni se pueden quedar estas a medias o estropearse el vino por no haberlo consumido a tiempo”.

El carácter aislante y hermético del acero inoxidable permite, asimismo, mantener las propiedades del vino, ya que “no hay intercambio de aire u oxígeno con el exterior”. De acuerdo con las estimaciones basadas en la experiencia de los clientes de PORTINOX, “el vino se puede mantener sin alterar sus propiedades hasta 12 meses”, garantizando su calidad desde la primera hasta la última gota.

La dispensación del vino se realiza directamente a través de un sistema de grifo, muy similar al de la cerveza, la sidra o el vermú. “En lugar de utilizar CO2, se usa una combinación de nitrógeno al 75% y CO2, al 25%. El dispensador puede ser la misma columna que se utilice para otras bebidas, pero sustituyendo el gas”, detalla Guillermo Rueda y Cabeza.

Cambio emergente en el mercado español

Sin embargo, desde PORTINOX son conscientes de que esta revolución en el mundo del vino implica también un cambio de mentalidad. “El mercado español es muy tradicional. Nos gusta ver la botella y la etiqueta y nos dejamos influir directamente por lo que vemos, antes que por la sensación que nos pueda generar el vino en sí”, afirma. Aún así, se está notando “cierta receptividad tanto desde el punto de vista de la bodega como del consumidor final a ver el vino envasado en barril”.

De hecho, su uso ya ha empezado en comunidades como Madrid y Andalucía. Según Guillermo Rueda y Cabeza, “en Portugal sí es común ver el vino de barril, y en Estados Unidos resulta totalmente normal. En otros países como Australia, Eslovenia, Italia o Austria se está también fomentando el consumo” de este tipo de productos.

En el caso de las empresas vitivinícolas, ven con buenos ojos que este envase sea reutilizable, respetando, de este modo, el medio ambiente. De hecho, la vida útil del barril de acero inoxidable está estimada en 30 años. Una vez pasado ese período y en caso que el barril estuviera muy dañado por el uso, se podría incluso vender como materia prima asegurando un retorno de la inversión final. Además, este revolucionario embalaje supone, por otro lado, un 96% de reducción anual de la huella de carbono frente a la utilización de la botella.

Con el fin de adaptarse a las necesidades de sus clientes, PORTINOX ofrece soluciones personalizadas. Sus barriles están disponibles en formatos desde 5 hasta 100 litros. A mayores, la empresa está trabajando en un proyecto de creación de “un mini barril de 3,7 litros que llevaría su propio mini sistema de dispensación”, una oferta que se dirigiría a particulares y envasadores de pequeño volumen anual.

Medio siglo de existencia

PORTINOX cuenta ya con medio siglo de experiencia en la transformación del acero inoxidable en gran variedad de productos industriales. Desde 1978 esta firma pertenece al Grupo Teka y entre sus principales artículos se encuentran desde sanitarios, fuentes para beber agua, barriles para bebidas, botellas para gas, hasta instalaciones para cocinas industriales.

Además de vender dentro del conjunto español, PORTINOX exporta sus productos a más de un centenar de países. Su máximo objetivo es posicionarse, de cara a 2020, como “líder mundial en la fabricación de contenedores de acero inoxidable para todas las industrias. Es un objetivo ambicioso, lo sabemos, pero contamos con un buen equipo técnico y un prestigio en el mercado que nos da soporte para trabajar por conseguirlo”, concluye el Director Comercial y de Marketing de nuevos mercados y productos de PORTINOX.