El auge del vino sin alcohol impulsa la apertura de un centro pionero en desalcoholización en el suroeste de Francia

El Chai Sobre, un nuevo centro dedicado a la desalcoholización de vino, ha abierto sus puertas en Vic-Fezensac, en el departamento francés del Gers. La instalación comenzó su actividad en junio y responde a una demanda cada vez mayor de vinos con 0% de alcohol. Romain Laher, ingeniero y responsable del proceso de desalcoholización en el centro, explica que los consumidores buscan productos sin alcohol pero que mantengan las características aromáticas del vino tradicional.

El proceso de elaboración de estos vinos no difiere mucho del método habitual hasta el momento en que se retira el alcohol. Frédéric Ben, encargado de vinificación y enología en el Chai Sobre, señala que la clave está en un sistema desarrollado recientemente que utiliza la destilación en frío. Esta técnica consiste en reducir la presión dentro de la máquina para disminuir la temperatura de ebullición del alcohol, lo que permite extraerlo a temperaturas más bajas que las empleadas en la destilación convencional. El procedimiento incluye varias fases, entre ellas el paso del alcohol a estado de vapor, lo que ayuda a conservar mejor los aromas originales del vino.

Sin embargo, la eliminación del alcohol intensifica la acidez del producto final. Para equilibrar esta sensación, se añade azúcar al vino desalcoholizado antes de su embotellado. Este año, el centro prevé producir unos 6.000 hectolitros y espera aumentar su capacidad hasta alcanzar los 80.000 hectolitros anuales en los próximos años. El proyecto es fruto de la colaboración entre la start-up Moderato y el grupo Vivadour, que agrupa a 400 viticultores del Gers.

Sébastien Thomas, cofundador de Moderato, explica que eligieron esta región por los perfiles aromáticos particulares de variedades como gros manseng, colombard y sauvignon. Estas uvas permiten adaptarse a los cambios culturales y sociales relacionados con el consumo de bebidas alcohólicas. Pascal Dupeyron, director de la rama vitícola de Vivadour, recuerda que desde los años 60 las ventas de vino han disminuido notablemente en Francia, especialmente entre los jóvenes. Ante esta situación y para dar salida a las reservas acumuladas por los viticultores, Vivadour decidió apostar por la producción de vino desalcoholizado desde 2023.

Un informe del Comité Nacional de Interprofesiones de Vinos con Denominación e IGP estima que el consumo de vino podría caer un 25% para 2035. Por otro lado, según datos de la consultora Fact.MR, el mercado mundial del vino sin alcohol podría alcanzar los 5.000 millones de dólares en 2032 frente a los 1.800 millones registrados en 2022.

Moderato comercializa actualmente la mitad de su producción en Francia y la otra mitad en mercados internacionales como Canadá, Suiza, Dinamarca y Emiratos Árabes Unidos. La empresa busca posicionar el vino sin alcohol como parte integral del patrimonio vinícola francés y responder así a las nuevas tendencias de consumo tanto dentro como fuera del país.