La nueva reglamentación europea dará mayor protección jurídica a los vinos españoles

El ministro Planas destaca la importancia de las indicaciones geográficas para la apertura de nuevos mercados

Miércoles 10 de Abril de 2024

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La reciente aprobación de una nueva reglamentación sobre indicaciones geográficas por parte de la Unión Europea (UE) ha sido motivo de celebración en el mundo vinícola español, no solo por la protección jurídica adicional que ofrece a los vinos del país, sino también por el impulso que significa para su control tanto en el mercado como en el punto de venta. Este cambio legislativo, que tuvo lugar bajo la Presidencia española del Consejo de la UE, es un claro reflejo del compromiso y la influencia de España en el ámbito vitivinícola europeo y global.

Durante la clausura de la Asamblea General de la Federación Española del Vino (FEV) en el Instituto Cervantes, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, no solo destacó este logro sino que también subrayó la posición de España como tercer productor mundial de vino, tras Italia y Francia. España se enorgullece de contar con 146 indicaciones geográficas vinícolas reconocidas por la UE, de las cuales 103 son denominaciones de origen protegidas (DOP) y 43 son indicaciones geográficas protegidas (IGP), lo que subraya la riqueza y diversidad del patrimonio vinícola español.

La reforma del reglamento sobre indicaciones geográficas representa un avance significativo en la gestión de estos sellos de calidad. La figura de la Agrupación de Productores Reconocida (APR), similar al Consejo Regulador español, juega ahora un papel fundamental, con competencias exclusivas en ámbitos como la modificación del pliego de condiciones o el uso del nombre en alimentos procesados preenvasados. Además, por primera vez, la protección se extiende al ámbito digital, protegiendo los nombres de calidad en internet, un espacio cada vez más relevante para la comercialización y promoción del vino.

La visión de Luis Planas sobre la vitivinicultura como "punta de lanza del sector agroalimentario español y de la economía de España" refleja la importancia estratégica de este sector, que no solo es un emblema de tradición sino también de innovación y progreso. La adaptación a las demandas de un consumidor cada vez más exigente, que busca productos desalcoholizados o que valora la información sobre origen, trazabilidad y sostenibilidad, es fundamental. En este sentido, el uso de nuevas tecnologías como los códigos QR para ofrecer esta información de manera accesible es un claro ejemplo de cómo la tradición vinícola se encuentra con la innovación.

El apoyo del ministerio al sector a través de políticas promocionales, como la estrategia Alimentos de España y campañas internacionales como "Spain Food Nation", son clave para la expansión de los vinos españoles en mercados extranjeros, donde la calidad y diversidad de los productos españoles son cada vez más apreciados.

El homenaje a Pau Roca, quien fuera secretario general de la FEV durante 27 años y el primer español en liderar la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV), cerró el evento con un recordatorio de la importancia de la templanza, el diálogo y la comunicación para el avance de la sociedad y, por extensión, del sector vitivinícola. La entrega de un galardón de reconocimiento póstumo a la viuda de Roca fue un momento emotivo que subrayó el impacto duradero de su trabajo para el prestigio del vino español en el mundo.

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