Las 4 p's del marketing mix: el producto

Como señalaba en mi articulo anterior considero como producto únicamente el #vino (la bebida), por lo que no centraremos nuestro interés...

Miércoles 10 de Mayo de 2023

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Como señalaba en mi articulo anterior considero como producto únicamente el #vino (la bebida), por lo que no centraremos nuestro interés ni en la botella, ni en la etiqueta, por ejemplo.

Actualmente, la gran mayoría de los vinos son de buena calidad, pero precisamente por ello es por lo que tendremos que concentrar nuestros esfuerzos en diferenciarnos de nuestros competidores desde el propio producto y para ello tendremos que reunir en él una serie de características, a mi modo de ver, imprescindibles.

Nuestro producto debe ser original, debe ser único, con alguna nota distintiva, ya que hay muchos vinos que se parecen entre sí y es precisamente por ello que los consumidores buscan esa nota diferencial. Pero tenemos que ser originales respetando una serie de parámetros.

Uno de ellos sería la tipicidad, un factor importante: si compro un vino de la variedad Tempranillo, espero que contenga notas similares a otros vinos de esta variedad, no de otras variedades de uva.

Otro parámetro para tener en cuenta sería el uso de uvas autóctonas, ya que los consumidores buscan lo mejor de cada región y valoran las uvas autóctonas cada vez más. ¿Es viable un vino de la variedad Verdejo* hecho en Levante? Algunos consumidores lo probarán por curiosidad, pero la clave es si lo comprarán de nuevo, y aquí la probabilidad es baja, precisamente por lo indicado.

El siguiente parámetro que no podemos perder de vista es la evolución del gusto, preferencias y exigencias de los consumidores, evolución a la que nuestro producto debe acompasarse. Por ejemplo, en el pasado estaban en auge lo vinos con mucho tiempo de crianza en barrica, y sin embargo ahora se valora más la fruta y la frescura del vino en lugar del "sabor a madera". Otro ejemplo de esto sería el champagne: actualmente los más vendidos contienen un máximo de 12 gramos de azúcar por litro, mientras que en el s. XIX solía tener unos 150 gramos por litro.

El último parámetro sería el compromiso de la bodega con el medio ambiente, factor que está cobrando cada vez mayor importancia y que será fundamental en el futuro. Con esto no quiero decir que todos los vinos tendrán que ser ecológicos u orgánicos, sino que los #consumidores exigirán que el vino haya sido elaborado de forma responsable y respetuosa con el medio ambiente.

Muchas #bodegas invierte años en conseguir un producto de calidad y que aúne estos parámetros, para luego intentar solucionar las otras P's del marketing con prisa, debido a la creencia errónea de que un buen producto asegura el éxito de la venta. La semana que viene seguiremos analizando las otras P's y su impacto en el éxito no sólo del producto, sino de la bodega.

*uva blanca mayormente cultivada en Rueda (Castilla y León)

Foto: Davidson Luna (Unsplash)

Un artículo de Javier Bruk Ferretti
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