Científicos de Madrid y Zurich descubren que el vino tinto previene enfermedades bucales y pérdida dental

Algunas investigaciones llevadas a cabo con anterioridad sugerían que el vino, en gran parte debido a su acidez, puede erosionar el esmalte dental.

Sin embargo, ahora un nuevo estudio publicado en la Journal of Agricultural and Food Chemistry afirma que los beneficios del vino para los dientes podrían ser mayores de lo que imaginamos.

Journal of Agricultural and Food Chemistry (JAFC) es una revista científica bimensual editada desde 1953 por la American Chemical Society y dedicada a la publicación de artículos originales de investigación en el campo de la agricultura, química aplicada y la tecnología de los alimentos.

JAFC afirma en su última edición que el vino tinto tiene propiedades antimicrobianas que pueden prevenir la enfermedad periodontal y la pérdida de dientes.

Los dientes son especialmente susceptibles a las bacterias especialmente cuando un microorganismo penetra en el diente, y permanece allí, produciendo altos niveles de ácido, que con el tiempo demineraliza los dientes y puede conducir a enfermedades.

Los científicos han estado buscando una aplicación antimicrobiana eficaz para la boca, con el menor número de efectos secundarios posibles.

Para este estudio, investigadores de las universidades de Madrid y Zurich utilizaron un biofilm modelo de una colección de microorganismos que se asemejan a la placa dental humana, a los que se añaden cinco especies de bacterias que podrían causar la fiebre aftosa.

Dada las propiedades antisépticas del vino, y a que los polifenoles son conocidos por combatir eficazmente las bacterias, los científicos optaron por realizar las pruebas aplicando vino tinto, vino tinto con extracto de semilla de uva, agua y una solución de etanol al 12 por ciento a la biopelícula.

Los resultados revelaron que el vino tinto con extracto de semilla de uva añadido como agente antibacteriano resultaba más eficaz en la lucha contra tres de las cinco cepas bacterianas. El vino tinto común demostró ser eficaz contra dos de las cinco cepas.