Bodegas Altizia busca inversores

La bodega manchega Altizia inicia un plan financiero para evitar la liquidación

Bodegas Altizia, en Socuellamos (Ciudad Real), tiene capacidad para elaborar 250 millones de litros anuales.

La bodega manchega Altizia, en concurso de acreedores desde el pasado mes de julio, está preparando un plan para poder salir a flote y continuar con su actividad.

La entidad ya está en contacto con su acreedor hipotecario y con los proveedores para elaborar un convenio y evitar la liquidación, que podría estar listo antes de final de año.

A la vez, a fin de mantener su actividad y su plantilla (16 trabajadores), ha llegado a un acuerdo con el grupo vitivinícola J. García Carrión, con quien ha suscrito un contrato de elaboración de vino a maquila.

Bodegas Altizia, que está buscando algún socio inversor que le permita coger suficiente impulso, cerró el ejercicio de 2010 con ventas de 10 millones de euros, frente a los 17,83 millones del precedente y los 29,9 millones de 2008.

Esta caída de los ingresos se produjo tras concluir un plan inversor, cifrado en 18 millones de euros en el periodo 2004-2009.

En 2009 (último ejercicio con datos contables) acumulaba pérdidas de explotación por valor de 2,56 millones de euros (frente a beneficios superiores a 1,3 millones un año antes) y netas de 2,33 millones (+83.800 euros en 2008), así como unos fondos propios negativos, de 1,49 millones de euros.

La bodega manchega, situada en Socuéllamos (Ciudad Real), tiene capacidad para elaborar 250 millones de litros anuales, si bien venía comercializando del orden de los 75 millones de litros de vino, un 80% a granel y el resto con sus marcas 'Altizia', 'Amaro' y 'Tierra de Vientos'.