Fernando Isidro: “BARCOLOBO El Jaral 2012 es un vino lleno de matices fruto de una cuidadosa selección y elaboración”

Desde sus comienzos, Bodegas BARCOLOBO, que dirige Fernando Isidro, ha apostado por una viticultura sostenible y respetuosa con el privilegiado entorno en el que se encuentran sus viñedos, la Reserva Natural "Riberas de Castronuño-Vega del Duero".

En más de una década de actividad han ido incorporando a su catálogo nuevos productos, que ahora se completan con BARCOLOBO El Jaral, un vino Premium en el que se combinan tres variedades de uva y que envejece en barricas nuevas de roble francés durante al menos 18 meses y que permanece en botella otros 24. Una propuesta para aquellas personas a las que les guste disfrutar de un gran vino.

Su empresa lleva una década dedicada a la elaboración de vinos de primera calidad. ¿Cómo ha evolucionado hasta la fecha?

Fue en 2001 cuando decidimos cumplir con el sueño que teníamos en la familia de recuperar la tradición vitivinícola que hubo en La Rinconada, así reconvertimos las parcelas más idóneas en viñedos y rehabilitamos un antiguo almacén de grano que hoy alberga nuestras instalaciones. Tras estudiar bien el terreno y vinos que queríamos elaborar decidimos apostar por tres variedades: tempranillo, cabernet sauvignon y syrah.

El primer vino que elaboramos fue el crianza, que comenzamos a comercializar en 2007. Una añada después, comenzamos a elaborar un vino roble (origen del que ahora es BARCOLOBO La Rinconada), seguido de BARCOLOBO Verdejo (añada 2009) y BARCOLOBO Lacrimae Rerum (añada 2013) hasta completar la gama que hoy día tenemos y que cerramos ahora con el lanzamiento de BARCOLOBO El Jaral.

¿Qué características tiene este nuevo vino?

BARCOLOBO El Jaral 2012 es el vino de más alta gama de la bodega y es fruto de una cuidadosa selección de nuestras mejores uvas, de una cuidadosa elaboración, y que hemos lanzado al mercado en el mes de octubre. Barcolobo El Jaral se elabora a partir de las variedades: Cabernet sauvignon, syrah y tempranillo, envejece en barricas nuevas de roble francés durante al menos 18 meses y ha permanecido en botella otros 24 meses.

¿A qué tipo de público se va a dirigir? ¿Con qué plato lo maridaría?

BARCOLOBO El Jaral es un vino lleno de matices dirigido a todo aquel que le guste disfrutar de un gran vino. Se trata de un vino lleno de aromas, complejo y con cuerpo, a la vez que elegante. Un vino para acompañar guisos, carne de caza o asados, pero sobre todo para disfrutar en cada sorbo.

¿Qué lo diferencia de otras elaboraciones dentro de la Indicación Geográfica Tierra de Castilla y León?

Sin duda alguna los varietales utilizados, el modo en que trabajamos en el campo, el esmero en la selección de las uvas y la meticulosidad en la elaboración, y por supuesto, y tal y como hemos mencionado, el entorno en el que nacen. Todo ello hace que sea un vino diferente y que al igual que el resto de nuestros vinos sea un vino con identidad, donde la armonía entre fruta y madera representa un equilibrio capaz de conquistar el paladar de los consumidores más exigentes.

¿Cuál es el secreto para garantizar esa excelencia en sus vinos?

Un control exhaustivo de cada uno de los procesos de elaboración del vino, primero en el viñedo dado que sólo con una materia prima excelente se pueden elaborar grandes vinos y posteriormente en bodega. Aquí todos los procesos se llevan con sumo cuidado y de manera artesanal. Un control exhaustivo es lo que hace que con cada añada podamos ofrecer los mejores vinos.

¿De qué manera influye el entorno en el que se encuentra su bodega boutique, la Reserva Natural "Riberas de Castronuño-Vega del Duero"?

Sin duda alguna, el entorno en el que estamos ubicados influye en la singularidad de nuestros vinos. Somos una de las pocas bodegas que puede presumir de tener su viñedo e instalaciones en una Reserva Natural, lo que imprime parte de la personalidad y singularidad de nuestros vinos. Además, elaboramos nuestros vinos siguiendo criterios sostenibles y el hecho de encontrarnos en una reserva natural hace que el trabajo en viñedo, y posteriormente en bodega, se lleva a cabo bajo un respeto absoluto por este entorno natural. A esto debemos añadirle que estamos totalmente aislados de otros viñedos lo que hace que las prácticas y problemas de otros viñedos no afecte al nuestro (uso de pesticidas, plagas...).

Mantenerse casi 10 años en el mercado requiere también una adaptación a los nuevos tiempos. Aparte de la presentación de este nuevo vino, ¿cuáles son los proyectos más inmediatos?

Por el momento nuestros objetivos están enfocados a seguir elaborando los mejores vinos en cada añada. Tenemos una previsión de crecimiento paulatina que acompañaremos con la ampliación de nuestras instalaciones. Pero todo ello, poco a poco, garantizando siempre que podamos mantener la calidad en toda nuestra producción, que, acorde a con nuestra filosofía, siempre prima sobre la calidad.

Sin duda, el packaging se ha convertido en un elemento crucial a la hora de fomentar las ventas. ¿Qué opinión tienen desde Barcolobo?

Efectivamente, es algo en lo que siempre estamos trabajando, así este año hemos presentado la nueva imagen para nuestro buque insignia BARCOLOBO 2012, para el que hemos apostado por una etiqueta de diseño elegante y depurado, que refleja mejor la esencia del vino y de la bodega. En los últimos años también hemos renovado la imagen de nuestro roble y de nuestro blanco, BARCOLOBO La Rinconada y BARCOLOBO Verdejo FB, que coincidieron con la presentación en el mercado de nuestro rosado, BARCOLOBO Lacrimae Rerum.

Contando con un entorno único, ¿cómo se suma su bodega al carro del enoturismo? ¿Cuentan con iniciativas en esta línea?

En estos momentos no estamos potenciando mucho el enoturismo aunque sí está entre nuestras previsiones. Al tratarse de una bodega de producción limitada y situada en un entorno natural protegido, por el momento solo se organizan visitas privadas y bajo petición.