La DO Tarragona y la IGP Calçot de Valls unen fuerzas

Recetas tradicionales e innovadoras presentadas en un evento para celebrar la identidad culinaria del territorio

Viernes 24 de Enero de 2025

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La Denominación de Origen Tarragona y la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Calçot de Valls han organizado un evento para destacar la versatilidad del calçot en la gastronomía, acompañado por vinos de la DO Tarragona. Este encuentro, dirigido a prescriptores gastronómicos, forma parte del programa que celebra a Cataluña como Región Mundial de la Gastronomía 2025. La jornada contó con la participación de diversas autoridades locales, como el alcalde de Torredembarra, Vale Pino, y la directora de los Servicios Territoriales del DARPA en Tarragona, Glòria Tribau, además de representantes de ambas instituciones promotoras.

El itinerario incluyó una visita a una plantación de calçots en Horta Torrenca, en Torredembarra, donde se mostró el proceso tradicional de cultivo y las exigencias que garantizan la calidad bajo el sello de la IGP. Según Daniel Rovira, productor de Horta Torrenca, estas normativas aseguran al consumidor que los calçots certificados cumplen con medidas y formas específicas.

Posteriormente, los participantes visitaron la Vinícola de Nulles, una de las catedrales del vino de Tarragona diseñada por Cèsar Martinell. Allí pudieron conocer la historia del edificio y degustar vinos de la DO Tarragona. La presidenta de esta denominación, Maria Rosa Blanch, destacó el trabajo conjunto con el Instituto Catalán de la Viña y el Vino (INCAVI) para investigar el comportamiento del macabeu, variedad característica de la región, en contextos de estrés hídrico. Además, subrayó la riqueza enoturística de la DO, reflejada en las más de 30 actividades que integran su Ruta del Vino.

El evento culminó en el restaurante Portal 22 de Valls, donde se presentaron armonías gastronómicas entre calçots y vinos de la DO Tarragona. Entre las propuestas degustadas hubo recetas tradicionales e innovadoras, como carpaccio de presa con pesto de calçot, tortilla deconstruida con calçot y coca de pulpo con calçot caramelizado y tocino ibérico. Dalmaci Clofent, presidente de la IGP Calçot de Valls, expresó su satisfacción por mostrar las posibilidades culinarias del calçot en un contexto que celebra la identidad y la riqueza culinaria del territorio. Además, recordó que en 2024 se vendieron 8,5 millones de unidades certificadas, un dato que refleja la relevancia de este producto en la gastronomía catalana.

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