China se une a la OIV

Este mes de noviembre de 2024, la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) aceptó formalmente la solicitud de adhesión presentada por China, marcando un momento significativo en la historia de la institución. La solicitud, enviada por el Ministerio de Agricultura y Asuntos Rurales de la República Popular China el 14 de mayo de 2024, dio inicio a un proceso de consulta reglamentario de seis meses que concluyó con éxito. Como siguiente paso, las autoridades chinas deben ratificar la aceptación en el plazo de un año, periodo durante el cual China podrá participar plenamente en los trabajos de la organización.

La OIV, fundada el 29 de noviembre de 1924, celebra así la incorporación de su primer nuevo miembro en el marco de su segundo siglo de existencia. Esta nueva incorporación subraya la relevancia internacional de la institución, que actúa como un foro técnico y científico para cuestiones relacionadas con el sector vitivinícola.

China, con la tercera mayor superficie de viñedos plantados a nivel mundial, se posiciona como un actor clave en el panorama mundial del vino. Además, es el mayor productor de uva de mesa del mundo y ocupa el octavo lugar en consumo de vino. La adhesión de este país aporta un importante incremento de la representatividad de la OIV, que ahora cuenta con 51 países miembros y abarca el 85% de la superficie de viñedos plantados a nivel mundial.

Este movimiento no solo refuerza la posición de la OIV como organismo de referencia para el sector, sino que también refleja el creciente interés de China en fortalecer su presencia e influencia en la industria vitivinícola internacional. La incorporación de China podría abrir nuevas perspectivas para la cooperación técnica, la investigación y el desarrollo de políticas que respondan a las dificultades actuales y futuras del sector.

Con su ingreso en la OIV, China se une a una red mundial de países que comparten conocimientos y establecen estándares comunes en la producción y comercialización del vino, contribuyendo a un mercado más integrado y sostenible. Este paso marca un nuevo capítulo en la relación entre China y las instituciones internacionales dedicadas al vino y la viña.