Bodegas Clemente, un proyecto personal muy ecológico

Clemente García, ideólogo de este proyecto, que puso en marcha con una idea bien clara, la de respetar la tierra como garantía de futuro, por lo que decidió apostar por una viticultura ecológica. Hoy son ya casi medio millón de hectáreas en todo el mundo las que se dedican a la viña orgánica, según la Organización Internacional del Vino (OIV).

En nuestra bodega trabajamos de esta forma todos nuestros viñedos, dejando que la uva exprese de manera natural todo su potencial y esencia varietal y del terruño. El resultado son unos vinos  más originales, sobre todo, en cuanto a aromas.

Además, al no usar productos químicos, en el entorno de nuestros viñedos fomentamos un ecosistema natural de animales y vegetales que protege a la viña de plagas y enfermedades.

Este joven viticultor, nos cuenta sus orígenes por la vinicultura, "mis dos abuelos eran agricultores, y también elaboraban vino. Desde muy pequeño he tenido la inquietud primero en el viñedo y luego en la elaboración". Y añade que "como te he comentado anteriormente, mis dos abuelos elaboraban vino y cada uno tenía su pequeña bodega, que abandonaron a mediados de los años 70, (años muy complicados para el vino) para incorporarse a la cooperativa de la zona, de la cual fueron fundadores. Yo la bodega la tenía debajo de casa y el verla abandonada me daba mucha pena. Empecé a recuperarla con mis propias manos, durante cinco años, y después de terminar mis estudios de enología en el 2014 elaboré mi primera añada.

BODEGA

Nos relata que su bodega es pequeña, pero muy  coqueta, pues  '"se apoya"' en una viga centenaria original de la casona familiar del siglo XVI. Ubicada en el casco histórico del pueblo riojano de Baños de Río Tobía, en la que mis antepasados elaboraban sus vinos y que mi abuelo dejó a mediados de los años 70, cuando se incorporó a la Cooperativa de la zona".

A partir de 2006 empecé la recuperación de la antigua bodega, que se estaba hundiendo, y una vez que fue avanzando la obra vi posibilidades de adaptarla y utilizarla de nuevo. Ahí comenzó un proyecto personal de esfuerzo y trabajo que me condujo a la elaboración de mi primera añada en 2014.

He adaptado la bodega a las necesidades de una producción vitivinícola actual y artesanal. Manteniendo el carácter y arquitectura original, como el calado y la viga central, en unas instalaciones que se reparten en diferentes alturas, lo que me permite mover el vino por gravedad, reduciendo al máximo la utilización de los elementos mecánicos. De esta forma puedo preservar al máximo la integridad de las uvas  y conseguir unos vinos más puros. En la bodega puedo tener un control constante de temperatura y humedad todo el año, nos comenta.

Hasta el punto del significado de la casa, hoy bodega que "los elementos de la arquitectura original tienen tal significado para mí que quise reflejarlo en las etiquetas de los vinos: la viga centenaria ilustra la etiqueta de Clemente García garnacha, mi vino más emblemático; la columna que sujeta la viga aparece en la de Clemente García tempranillo y un detalle de las piedras de nuestro calado se refleja en Clemente García viura.

Mi cometido en la bodega es  de todo. Es un proyecto personal que puse en marcha hace unos años, que te he comentado en el caserón familiar. Soy el bodeguero propietario, lo mismo estoy en la viña, enseñando la bodega o en una feria.

2021 COSECHA EXCELENTE

Sobre que fue la cosecha del 2021, Clemente nos declara que "en mi caso la cosecha del 2021 ha sido de las mejores que he elaborado, en cuanto a cantidad y calidad. Nosotros nos encontramos en una zona fría de la DOC. Rioja y la vendimia la prolongamos hasta finales del mes de octubre. Este año la climatología nos ha marcado la añada con un mes de octubre con noches muy frías y días soleados con altas temperaturas. Ese contraste de temperatura ha sido fundamental para conseguir una madurez perfecta. Para el 2022 de momento es pronto, así que con expectativa.

Nos esforzamos mucho en el cuidado de nuestras viñas y apostamos por la viticultura ecológica porque consideramos que sus beneficios son muchos, pero nos faltaba el reconocimiento oficial. Este logo facilita que todos los consumidores identifiquen nuestros vinos como productos ecológicos certificados como tal por una agencia u organismo de control autorizado por la UE. Esto confirma que cumplimos unas condiciones estrictas de producción, transformación, transporte y almacenamiento.

"Sacamos al mercado la añada 2018 de la variedad garnacha que estrena la contraetiqueta de Certificación ecológica de la UE.

Este vino desde mi punto de vista refleja que ha sido un vino cuidado y tratado con mimo, debido a la selecta selección de las mejores uvas garnachas procedentes de viñedos de entre 25 y 75 años. Me llamo la atención, el aroma especial que desprende como consecuencia de haber pasado  se una crianza de 15 meses en bocoyes de 500 L, lo noto que es un vino que es original, apetitoso, esférico y con un tanino muy exquisito.

Sobre sus potenciales clientes nos expresa que" hay un consumidor más tradicional, que busca marcas más conocidas. Pero sí que es cierto que cada vez hay más gente, con más inquietud y con ganas de probar diferentes tipos de vino. Las tiendas (físicas), para el tipo de vino que yo elaboro, hacen un trabajo muy importante, siempre intentan cuidar este perfil de vino y en líneas generales son gente muy profesional. Entiendo que "hay un hueco en el mercado para este tipo de vinos, ya que hay un consumidor que lo está demandando, por otro lado, también hay muchas bodegas y cuesta hacerse un sitio. Y entiendo el mundo del vino como algo fundamental  "en mi caso en la comida, y en la compañía influye mucho, y luego me dejo aconsejar por la gente que sabe (tiendas físicas) sobre que vino tomar. Pero pienso que este sector  engancha mucho y es un aprendizaje constante, cada día aprendes cosas nuevas.

Y nos habla por último sobre el momento que  está viviendo" ahora estoy disfrutando de lo que hago. Yo elaboro mis propias uvas, de mis propios viñedos, en torno a unas 3 hectáreas, y es lo que más me gusta, el trabajo en el viñedo. En bodega también me encuentro muy cómodo y luego también tengo que realizar tareas comerciales y administrativas. En este momento yo controlo todo el proceso y es lo que más me gusta y lo que más disfruto.

Y para mí es esencial en un vino y lo más significativo es" su calidad y no la cantidad. Y, ofrecer un producto lo más honesto posible. Intervenir lo menos posible en el proceso, tanto en el viñedo, donde efectuamos viticultura 100% ecológica, como en bodega".