La madera “dentro” del vino

Dentro del vino y no alrededor del vino. Todos conocemos el paso del vino por barricas, foudres, tinas, barriles, toneles… todo ello de madera. Pero existen prácticas de “crianza” en la que la madera está literalmente dentro del vino, es decir, sumergida en el vino

Javier Campo

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La crianza o envejecimiento de los vinos en recipientes de madera, normalmente barricas, es una práctica común utilizada en todas o casi todas las regiones vitivinícolas del planeta. Lo que en principio fue un método de transporte y almacenamiento se convirtió en uno de los pasos importantes en la elaboración de los grandes vinos. Durante el paso por la barrica, el vino experimenta importantes cambios que afectan a su estabilidad, durabilidad y características organolépticas.

Como ya he explicado en otras ocasiones, dependiendo del tipo de madera elegida, estas características van a propiciar que el vino tenga unos u otros aromas y sabores, estructura y color. El tratado de la madera también va a influir de manera importante por su tostado, vaporizado, secado o tamaño y volumen en el resultado final del vino. Pero la madera cuesta dinero, el espacio de ciertas bodegas es el que es y los recursos son los que son. Por ello y aunque algunos no lo conozcan existen métodos de modificar el vino con la madera que no tienen nada que ver con el continente.

Sumergir madera en el vino es una herramienta de vinificación y crianza que está aceptada y normalizada en algunas zonas vitivinícolas del mundo y que, incluso la Unión Europea ha aprobado en uso. El formato es múltiple y variopinto. Lo más conocido son los chips. Pero también existen los cubos, el polvo, los lápices, las duelas, las fichas de dominó, las láminas de infusión, las astillas... Todo ello se sumerge dentro de algunos vinos.

Si se dice abiertamente, es más que probable que el vino pueda ser "rechazado" sin ni siquiera haberlo probado. Pero esta práctica está oculta en muchas bodegas que, para abaratar costes, utilizan y después dicen que el vino tiene crianza en roble de "tantos" meses. La verdad es que en lugar de poner "en" deberían poner "con". Algunos incluso incluyen la palabra barrica, lo cual ya me parece incluso fraudulento.

Imagínate un depósito de acero inoxidable con 20000 litros de vino y en su interior un par de cientos de kilos de madera sumergida en listones y cubos. Al cabo de unos meses. Ya tenemos una crianza con los toques de la madera que muchos les gusta encontrar de manera descarada.

La verdad, es que, si no eres muy experimentado, puedes no notar nada (o sí) pero si vas a una bodega que hace un millón de botellas de un vino en concreto y en las instalaciones solo tienen 80 barricas, pues solo hay que hacer números ¿no?

Javier Campo
Sumiller y escritor de vinos
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