Jocelyn Dominguez
Lunes 23 de Junio de 2025
Desde hace siglos, la comida en Asia no es solo un acto de alimentación, sino un ritual colectivo, una forma de encuentro. En los mercados callejeros de Hanoi, Tokio o Bangkok, se comparte mucho más que un plato: se comparten miradas, risas y costumbres. Y esa misma energía—colorida, caótica y deliciosa—es la que intenta capturar Yatai Yatoi, el nuevo espacio en Palermo que transforma una simple salida en una experiencia multisensorial.
Ubicado en Costa Rica 5802, este local fusiona gastronomía del Sudeste Asiático, coctelería de autor y entretenimiento con una ambientación digna de una película de anime. Pero lo que realmente lo convierte en el plan del momento es su sala de karaoke privada, donde cantar tus temas favoritos deja de ser un acto de vergüenza para convertirse en un juego liberador.
Cada turno dura dos horas y está pensado para grupos de hasta 14 personas. La intimidad que se logra ahí adentro es difícil de encontrar en otros espacios de Buenos Aires. No solo tenés más de 500 canciones para elegir, sino también luces que acompañan el mood, sonido perfecto y un personal amable que sabe cuándo intervenir y cuándo dejarte ser. En mi caso, terminé cantando hasta temas que creía olvidados, entre tragos y carcajadas.
La atención del equipo fue impecable: atentos, rápidos y con buena onda, sin invadir el momento. Esa combinación entre buena energía y respeto por la privacidad me pareció un detalle no menor.
Por supuesto, no puedo no hablar de la comida. La carta toma inspiración de países como Japón, Tailandia, Vietnam y Corea. Probé las gyozas de cerdo con salsa ponzu, mis preferidas, Nem Song: roll vietnamita con langostinos, mango, vegetales y menta, fresco y bien balanceado. Satay de pollo: brochetas con salsa de maní cremosa y especiada. Pancho Teri: pan bao esponjoso con salsa teriyaki, kimchi y maní japonés, ideal para los que buscan algo distinto y con power, y un pad thai con langostinos que estaba al nivel de los que probé viajando. Todo fresco, bien presentado y con sabores balanceados. Como broche de oro, me animé al Taiyaki (ese waffle con helado y caramelo de miso) y quedé encantada.
La coctelería está a cargo de La Peligrosa, y eso ya garantiza creatividad. Mi elegido fue el Karai Mango (tequila, sake, cítricos, mango y un toque de tabasco) una bomba dulce, cítrica y con un picante sutil que marida perfecto con la cocina del lugar. Otros destacados son, Nakazu Mule: vodka, sake, matcha y soda, ideal para los que buscan algo fresco, Ginger Cosmo: vodka, sake, arándanos y ginger beer, una reversión del clásico con personalidad.
Para los que no toman alcohol, también hay mocktails creativos como el Cocobunga, con lemongrass, limón y leche de coco, o el Better Tha Melona, con té verde, melón y chía activada.
Todo esto enmarcado en una decoración de estilo Asian Pop Tech, con luces de neón, carteles vibrantes y hasta una máquina para atrapar peluches. Cada detalle suma, y la experiencia se vuelve inmersiva, divertida y muy instagrameable.
Y como si todo esto fuera poco, hay una máquina para atrapar peluches (sí, de esas que ves en las películas). Me tenté, jugué… ¡y gané! Me llevé un Kirby, que ahora adorna mi escritorio como souvenir de una noche inesperadamente perfecta.
¿Los turnos? De jueves a sábado a las 18:00, 20:15 y 22:30 hs, y de domingo a miércoles a las 19:30 y 22:00 hs. Las reservas se hacen desde el link en la bio de su Instagram: [@yataiyatoi](https://www.instagram.com/yataiyatoi/).
Yatai Yatoi es más que una salida: es un viaje sensorial, un plan distinto y divertido que combina buena comida, tragos sorprendentes, risas compartidas… y, si tenés suerte, un peluche ganador. Volvería mil veces.