El abono verde se consolida como aliado frente al cambio climático en los viñedos mediterráneos

La técnica mejora la fertilidad del suelo, favorece la retención de agua y ayuda a la adaptación de la viticultura

Jueves 04 de Septiembre de 2025

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Mediterranean Vineyards Turn to Green Manure for Climate Resilience

El cambio climático está modificando las condiciones de la agricultura en la región mediterránea, con efectos directos sobre cultivos perennes como la vid. Para responder a estos problemas, el proyecto europeo Climed-Fruit ha reunido a un consorcio formado por asesores, asociaciones de agricultores, institutos de investigación, entidades educativas y un organismo de normalización. El objetivo es recopilar y difundir soluciones prácticas que ya pueden aplicarse en el sector agrícola, especialmente en la viticultura.

Climed-Fruit se basa en los resultados de nueve Grupos Operativos repartidos por Europa. Su finalidad es facilitar el intercambio directo de conocimientos entre investigadores y profesionales del campo. Entre las prácticas recogidas por este proyecto figura el abono verde, una técnica que se está utilizando en viñedos mediterráneos para mejorar su adaptación a las nuevas condiciones climáticas.

El abono verde consiste en sembrar especies vegetales seleccionadas entre las hileras de vid. Estas plantas se incorporan después al suelo como materia orgánica. El grupo operativo GASCOGN’INNOV ha desarrollado esta práctica y ha comprobado sus efectos positivos en la salud del suelo. El abono verde ayuda a aumentar la fertilidad, mejora la estructura del terreno y favorece la biodiversidad dentro del viñedo.

Uno de los principales beneficios es la capacidad del suelo para retener agua, algo fundamental en zonas donde las sequías son cada vez más frecuentes. Además, el abono verde reduce la erosión y actúa como una barrera natural frente al estrés hídrico. De este modo, los viñedos pueden soportar mejor los periodos secos y mantener su productividad.

La transferencia de estas técnicas desde los grupos operativos hasta los agricultores se realiza mediante talleres, publicaciones y asesoramiento directo. Climed-Fruit busca que estas soluciones lleguen a todos los profesionales del sector para que puedan aplicarlas según las necesidades de cada explotación.

El uso del abono verde representa una alternativa sostenible para la viticultura mediterránea. Permite mejorar la calidad del suelo sin recurrir a productos químicos y contribuye a mantener el equilibrio ecológico en los viñedos. La experiencia recogida por Climed-Fruit demuestra que estas prácticas pueden integrarse fácilmente en el manejo habitual de las explotaciones vitícolas.

El proyecto sigue trabajando para identificar nuevas soluciones que ayuden a los agricultores a adaptarse a las condiciones cambiantes del clima. La colaboración entre investigadores y profesionales es clave para asegurar que estos conocimientos se traduzcan en mejoras reales sobre el terreno.

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