Réquiem de fuego y hielo en la viña

El cambio climático acentúa los fenómenos climáticos extremos

Dos elementos, un mismo problema. En marzo y abril, algunas zonas vitivinícolas, no solo en España, se han visto sacudidas por una helada que ha provocado que veamos imágenes un tanto insólitas como son los viñedos incendiados con pequeñas fogatas repartidas equitativamente entre las cepas para evitar que las bajas temperaturas afectasen a la vid.

Y esto es quizás lo menos malo y más "ecológico" ya que también hay quien ha usado termo ventiladores y estufas con varios tipos de combustibles. Y es que a veces, la tesitura hace tomar decisiones un tanto drásticas para no perderlo todo. Aun así, mucha cosecha se perdió. Pero, la viña es fuerte y suele recuperarse y la vida, brota de nuevo.

Un viticultor enciende antorchas de fuego para combatir las heladas

Lo malo es cuando un par de meses después nos cae la gran tromba de agua y de hielo en forma de granizo. Un granizo de tamaño considerable que ha arrasado muchas hectáreas en muchos puntos y que este año ya son irrecuperables. El tema es que la afectación no se alargue hasta el próximo o próximos años, porque dependiendo de la zona, puede ser así.

Un papel importante lo juegan las compañías de seguros. No todas atienden de igual manera la situación y no todos los viticultores se ven compensados debidamente. No todas las coberturas ni los precios que pagar son iguales, por ende, no todas las compensaciones cubren todos los daños, pese a las pocas ayudas del Ministerio. Cabe recordar, que aquí estamos hablando solo de la viña, pero el campo es muy grande y tiene más tipos de cultivos. Y todo sale de lo mismo. Nos quedamos cortos en ayudas a quienes nos dan de comer y de beber.

Viñedo destrozado por el granizo

Frío extremo cuando no toca. Calor extremo cuando no lo esperar. Cambios de ciclos vegetativos. Vendimias en épocas inusuales. Zonas frías atacadas por el calor y viceversa. Condiciones térmicas que reafirman el cambio climático que estamos viviendo y que os contamos a aquellos que no se dan o se quieren dar cuenta de todo lo que está pasando. Sobre todo, cuando alguien se queja de los precios. Cada uno mira de diferente manera lo ajeno.