Miércoles 29 de Octubre de 2025
Leído › 685 veces

La Compañía Vinícola del Norte de España, conocida como CVNE, mantiene una relación estrecha con México desde hace más de seis décadas. Fundada en 1879 en Haro, Rioja, por los hermanos Eusebio y Raimundo Real de Asúa, la bodega ha pasado por cinco generaciones familiares. Su historia se basa en el respeto por la tierra, la innovación en los procesos de elaboración y un compromiso constante con la calidad.
La presencia de CVNE en México no se limita a la distribución de sus vinos. La marca ha logrado integrarse en la vida cotidiana y en las celebraciones de muchas familias mexicanas. Sus vinos figuran en restaurantes, tiendas especializadas y mesas particulares, acompañando tanto platos tradicionales como propuestas modernas de la gastronomía local.
La cocina mexicana, reconocida por la UNESCO como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, ofrece una variedad de sabores y texturas que han permitido a los vinos de CVNE encontrar un espacio propio. Por ejemplo, el Imperial Reserva suele acompañar platos como el mole poblano, mientras que el Monopole, un vino blanco con larga tradición en España, se sirve junto a ceviches y pescados frescos. Esta adaptación ha sido posible gracias a la diversidad del portafolio de la bodega.
Entre las etiquetas más conocidas en México se encuentran Cune Crianza y Reserva, La Val, Imperial Reserva, Contino, Roger Goulart, Monopole, Cune Bailarina y Bela. Cune Crianza es uno de los vinos más consumidos tanto en España como en México, valorado por su versatilidad y su capacidad para acompañar diferentes tipos de comida. Monopole, considerado el vino blanco más antiguo de España, ha sido bien recibido por quienes buscan frescura y tradición.
El vínculo entre CVNE y México va más allá del consumo. La bodega ha participado en eventos gastronómicos y culturales, colaborando con chefs y sumilleres para promover el conocimiento sobre el vino español. Además, ha impulsado actividades de formación para profesionales y aficionados al vino en distintas ciudades mexicanas.
La demanda de vinos españoles en México ha crecido en los últimos años. CVNE ha respondido a este interés ampliando su oferta y adaptando sus estrategias comerciales. La empresa trabaja con importadores y distribuidores locales para asegurar que sus productos lleguen a diferentes regiones del país.
El papel de CVNE en México también se refleja en su capacidad para conectar generaciones. Sus vinos están presentes tanto en reuniones familiares como en celebraciones importantes. Para muchos consumidores mexicanos, elegir un vino de esta bodega significa optar por una marca que asocian con calidad y confianza.
La relación entre México y CVNE sigue evolucionando. La bodega continúa invirtiendo en el mercado mexicano y busca mantener su posición como referente entre los vinos importados. Su historia conjunta es un ejemplo de cómo una marca puede integrarse en la cultura gastronómica de otro país a través del tiempo y la adaptación constante a las preferencias locales.
Leído › 685 veces