María Burgoa: la mente creativa detrás de vinos con carácter y esencia

La filosofía de Lar de Maía: calidad, tradición y sostenibilidad

Jueves 07 de Septiembre de 2023

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María Burgoa
La pasión vitivinícola de María Burgoa: un viaje desde la filología hasta Lar de Maía

María Burgoa no es una figura cualquiera en el mundo vitivinícola. Con una extensa trayectoria, esta licenciada en Filología Inglesa por la UVA de Valladolid ha transitado por caminos académicos y profesionales que le han permitido adquirir un amplio conocimiento en el sector del vino. Tras haber estudiado en la Universidad de La Rioja y adquirir experiencia en importantes bodegas de regiones como Rueda, Ribera de Duero y La Rioja, Burgoa decidió, en 2015, emprender su propio camino con la fundación de Lar de Maía.

Lar de Maía no es una bodega convencional. Se trata de un proyecto familiar que tiene un compromiso con el vino natural. Elaboran sus productos sin aditivos, buscando siempre preservar la esencia y las propiedades que ofrecen sus viñedos sostenibles. Estos viñedos, con una edad que oscila entre los 50 y 100 años, son trabajados de forma natural, garantizando un resultado que refleja la personalidad y el carácter tanto de la tierra como de quienes lo elaboran.

El compromiso con la calidad se refleja en la filosofía de la bodega. Basan su producción en el modelo de Vino de Pago, lo que implica cosechas limitadas y controladas. La atención al detalle y la búsqueda de técnicas naturales que respeten el suelo y la vid son esenciales para Lar de Maía. Sus vinos, que reflejan la mineralidad y elegancia de suelos arenosos, arcillosos y cascajosos, son influenciados por un clima continental con extremos térmicos y una pluviometría que no supera los 300 litros anuales.

María Burgoa, a pesar de su extensa formación en el campo, no se define como enóloga. Se ve a sí misma como una bodeguera, empresaria y creativa. Es esta capacidad creativa la que le permitió, durante un paseo por el viñedo en 2015, decidir elaborar un vino rosado gastronómico. Este vino, desde su primera añada con 2500 botellas, ha representado la esencia de Lar de Maía, y cada año buscan mejorarlo, manteniendo ese sello de sutilidad y modernidad.

Uno de los productos destacados de Lar de Maía es el vino natural elaborado a partir de uvas de agricultura ecológica no certificada. Este vino, hecho de uvas Tempranillo, tiene un grado alcohólico de 13,5% y pertenece a la denominación de origen Vino de la Tierra de Castilla y León. Su elaboración comienza con una vendimia manual, seguida de una vinificación en la que se despalilla el fruto y se fermenta a temperatura controlada. Posteriormente, el vino se cría con sus propias lías en depósitos de acero inoxidable. El resultado es un vino brillante con notas intensas a frutas rojas ácidas como fresas y frambuesas.

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